BARCELONA.- El DT portugués de Chelsea, José Mourinho, acusó a Barcelona de exagerar las faltas para provocar amonestaciones a sus jugadores, en una fuerte polémica, tras el empate 2-2 en el Camp Nou, por la Liga de Campeones.
Mourinho expresó que los aficionados catalanes le cantaron durante el partido que se fuera "al teatro", pero afirmó que fueron los propios jugadores del equipo catalán los que "teatralizaron" las faltas y lanzaron exageradas protestas para provocar amonestaciones.
El árbitro italiano Stefano Farina, duramente criticado por Barcelona, amonestó a seis jugadores de Chelsea y a cuatro del club catalán, en un partido duro, que registró a su vez 29 faltas cometidas por el club inglés, contra 14 del local.
"Creo que el partido no fue agresivo, pero cuando se ve el número de tarjetas ello se debe a que alguien trató de provocarlas. Ví en algunas jugadas siete u ocho jugadores rodeando al referí pidiendo tarjeta amarilla y no es fácil dirigir bajo esa presión", dijo Mourinho.
Mourinho, quien se manifestó confiado en que Chelsea pueda ganar la Liga de Campeones, respondió el miércoles por la noche apenas cuatro preguntas "hábilmente seleccionadas" por su jefe de prensa, Simon Greenberg, cuando concluyó el partido, según afirma hoy el diario catalán Sport.
Barcelona, defensor del título y obligado ahora a ganar todos sus próximos partidos para avanzar a la segunda fase de la Liga, se alivió al menos hoy al saber que el atacante islandés Eidur Gudjohnsen sufrió una lesión leve en su tobillo izquierdo y podría jugar este sábado ante Deportivo La Coruña.