SANTIAGO.- Tras una visita protocolar a la Intendencia Metropolitana, el recién elegido presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), Harold Mayne-Nicholls, se comprometió con el intendente Víctor Barrueto a crear una Fiscalía Antiviolencia para controlar los disturbios y desmanes que se producen en los recintos deportivos que albergan al balompié chileno.
Mayne-Nicholls sostuvo que la idea es que el nuevo organismo "sea dependiente de la ANFP y esté a cargo de un fiscal, obviamente, con conocimiento jurídicos" para que tome medidas que controlen efectiva y rápidamente a los hinchas que cometen delitos o realizan desórdenes en los estadios y sus inmediaciones.
Barrueto, por su parte, informó que también se llegó a un acuerdo para que la ANFP conforme un calendario anual, de manera que las autoridades tengan claro los eventos y las fechas de éstos, y que las nuevas autoridades destinen recursos económicos para la mejora de la infraestructura de algunos estadios. El intendente mencionó las puertas de ingreso del Estadio Nacional y casi en su totalidad el recinto de Melipilla.
En otro orden de cosas, Mayne-Nicholls se mostró contento por la disposición de Nelson Acosta a presentar su proyecto para la Dirección Técnica Nacional "porque eso demuestra su interés, motivación e inteligencia en pos de hacer bien las cosas".
Asimismo, el timonel dio muchos nombres (Claudio Borghi, Arturo Salah, Elías Figueroa, entre otros) que podrían interesar a la ANFP para que trabajen con la selección nacional, pero descartó alguna preferencia.