MOSCÚ.- Alberto Mancini, capitán del equipo argentino de Copa Davis, buscó contrarrestar las informaciones acerca de tensiones entre él y el número uno de la escuadra, David Nalbandian, y pidió "tranquilidad" para poder trabajar.
"Nos sorprendió muchísimo lo que vimos en los medios esta mañana", dijo Mancini en Moscú, donde desde el viernes se juega la final de la Copa Davis entre Argentina y Rusia.
El capitán argentino se refería así a la tensa conversación de 50 minutos que mantuvo el martes en la cancha central con Nalbandian, un cruce seguido por el resto del equipo y un nutrido grupo de periodistas.
"Anoche se salió a elucubrar sobre lo que hablamos con David en la cancha. Y nos sorprende mucho, porque la verdad que eso no hace más que crear una sensación mala para nosotros donde no la hay. La verdad es que estamos todos bien", insistió el capitán argentino, que se presentó junto a Nalbandian para intentar, dijo, "que esto se aclare".
"Es una sensación súper rara que un jugador no pueda hablar con un capitán. No es tan así. Si quiero hablar con él lo hablo dentro, fuera de la cancha, en diez minutos, una hora, una semana o un mes y sin ningún problema", dijo Nalbandian.
La reacción y las explicaciones del equipo argentino llegaron un día tarde, ya que el martes, al consultársele por lo sucedido, Mancini optó por poner gesto serio y responder un "no comments" (sin comentarios), que, lejos de aclarar el incidente, contribuyó a amplificarlo.
Nalbandian añadió hoy que su estado anímico no es el mejor. "Estoy pasando por un momento personal no ideal", dijo el número uno argentino, que se enteró hace pocos días, mientras jugaba el Masters de Shanghai, de la muerte de un sobrino y ahijado de nueve años.
"No veo malo que pueda hablar con el capitán de una cosa o de otra, y me parece que generar un problema donde no lo hay por parte de los medios es la verdad que lamentable", insistió Nalbandian.
Mancini tiene previsto anunciar oficialmente el equipo mañana, aunque el diario Olé publica en su edición de hoy que Juan Chela acompañará a Nalbandian como singlista el viernes.
El capitán admitió que la decisión de elegir a un jugador en lugar de otro -el caso de Agustín Calleri, si se confirma la opción por Chela- genera tensiones en el equipo.
"Estamos ante una final de Copa Davis, hay una situación de presión muy grande, y se viven momentos difíciles. Pero hoy leí en un diario que el equipo argentino está quebrado... Y eso no hace más que hacernos mal. Les venimos a pedir que esto se aclare y se corte la bocha (se frene), porque no hay nada de eso, nada más lejos de eso".
"Perjudica en la preparación; en estos días previos al partido tenemos que estar tranquilos", continuó Mancini. "Pasamos momentos difíciles cuando se define el equipo, porque hay gente que sale, gente que entra. Esos momentos para nosotros son difíciles, y estos días que vienen necesitamos que sean tranquilos".
"Nosotros no tenemos nada que ocultar", insistió Nalbandian. "Y si ahora tengo que hablar una hora más lo voy a seguir haciendo sin ningún problema. Lo que por ahí sí me duele es cómo repercute por ahí en el equipo".
Y Mancini lo apoyó. "Encontrarnos con esto no nos pone del mejor humor. Porque sabemos que estamos perfecto dentro y que hay un buen clima. Y que todos vengan hablando de esto, sin ninguna noción real de lo que pasó, porque todo son elucubraciones, nos pone tristes a nosotros, porque positivamente no va a influir nunca".
Ni el capitán ni el jugador aclararon qué discutieron durante la acalorada conversación del martes.
"Son cosas personales y técnicas entre el jugador y el capitán", dijo Mancini. "Empezamos a hablar de algo, y nos pusismos a hablar de varias cosas", agregó Nalbandian sin explicar mucho más.
Argentina buscará su primer título de Copa Davis, una competición en la que sólo disputó una final, en 1981. Rusia, en cambio, busca conquistar su segundo trofeo.
