Pese a la derrota, González mostró el mejor tenis de su carrera en Australia.
REUTERSSANTIAGO.- Fernando González llegó como décimo preclasificado al Abierto de Australia. En primera ronda debió enfrentar al ruso Evgeny Korolev (87°) a quien derrotó por parciales de 6-7 (4), 7-6 (8), 6-3 y 6-2 en poco más de dos horas. El tenista nacional sin mostrar su mejor juego, daba el primer paso en el torneo.
En la segunda ronda se midió contra el argentino Juan Martín del Potro (73°) quien terminaría siendo el jugador que más complicó al chileno en el camino a la final. 7-6 (7), 4-6, 6-7 (3), 6-4 y 4-0 (retiro) fueron los números para la victoria.
Durante el duelo, la barra chilena en Melbourne se hizo notar constantemente logrando sacar de quicios al argentino. “Se portaron peor que en Viña”, recordó Del Potro, visiblemente molesto antes de abandonar por dolencias en su brazo izquierdo.
En la disputa para acceder a los octavos de final, González debió enfrentar al crédito local Lleyton Hewitt (19°). A contar de este partido el tenista nacional comienza a elevar su juego exponencialmente.
“Si González pega fuerte, no hay nada que hacer”, diría resignado Hewitt tras el encuentro en que salió derrotado. 6-2, 6-2, 5-7 y 6-4 fueron los marcadores del partido.
En los octavos de final, la primera raqueta del país debió medirse ante el estadounidense James Blake (5°). El encuentro, en el papel, se presentaba como el más peligroso para el chileno. Pero no fue así y en tres sets 7-5, 6-4 y 7-6 (4) selló su paso a los cuartos de final.
Rafael Nadal (2°) era uno de los rivales que Roger Federer confesó esperar para la final, pero el español se topó con el mejor tenis de Fernando González quien lo derrotó sin perder un set por parciales de 7-5, 6-4 y 7-6 (4). El chileno se colocaba en forma brillante entre los cuatro mejores del torneo.
Luego de la victoria frente a Nadal, todo el país comenzó a ilusionarse con lo hecho por el oriundo de La Reina, ya que por primera vez accedía a las semifinales de un Grand Slam y porque más que los resultados el tenista nacional mostraba un tenis maduro, seguro y contundente.
La última valla antes de la final la ponía el alemán Tommy Haas (12°), que en el papel parecía menos complicado que Nadal o Blake, pero que venía de derrotar al argentino David Nalbandián (8°) y al ruso Nikolay Davydenko (3°). Pese a esas importantes victorias, el chileno sencillamente lo arrolló.
En apenas 90 minutos, Fernando González selló su paso a la final tras derrotar por 6-2, 6-4y 6-3 al alemán, casi sin cometer errores y con un tenis que rozaba lo perfecto.
Desde ese día hasta hoy todo el país compartió la ilusión y el anhelo del tenista nacional. La derrota frente a Roger Federer (1°) no borra el espectacular camino recorrido por el chileno en Australia. Mañana González aparecerá como número 5 del mundo y jugando a un nivel superlativo, con lo que definitivamente se asienta como top ten y le permite ilusionarse con seguir escalando en el ATP.