JOHANNESBURGO, Sudáfrica.- El técnico brasileño Carlos Alberto Parreira, nuevo seleccionador de Sudáfrica, prometió que los "Bafana Bafana" serán "competitivos" en su Mundial de 2010, en la primera Copa del Mundo organizada en el continente.
"Mi programa consistirá en construir un equipo competitivo. Eso es todo", declaró en Johannesburgo, en la primera conferencia de prensa desde que asumió su nueva función hace una semana.
"Es un proceso largo, que se hará paso a paso. No se pueden poner en marcha las ideas de un día para otro", añadió.
Interrogado sobre su objetivo con la selección sudafricana, se mostró evasivo. "El equipo local de un Mundial debe obligatoriamente clasificarse para la segunda ronda y después intentar ir lo más lejos posible", respondió.
El técnico que condujo a su país a su cuarto título mundial en Estados Unidos, en 1994, tendrá la delicada tarea de construir un equipo al que le falta confianza, y que no logró clasificarse para el Mundial 2006 de Alemania.
Eliminados sin haber marcado un solo gol en la primera ronda de la Copa de África de Naciones (CAN) de 2006 en Egipto, los "Bafana Bafana" ocupan el puesto 69° en el ránking de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), detrás de una quincena de otros países africanos.
Prueba de las dudas que atraviesa el fútbol sudafricano desde su regreso a la competiciones internacionales a principios de los '90 es que Parreira es el 14º entrenador en 14 años.
El brasileño anunció que el lunes empezará la primera concentración de entrenamiento con 23 jugadores. Su primer test tendrá lugar el 24 de marzo, frente a Chad, en partido de clasificación para la CAN-2008.
"Técnicamente son buenos. Pero su sequía de cara al gol me inquieta. No hacemos muchos goles. Es algo en lo que debemos trabajar", comentó, aunque no habló demasiado del estilo de juego que quiere adoptar.
El anuncio del traspaso de Parreira, hace unos meses, provocó una gran polémica en Sudáfrica debido al monto de su salario mensual, que se eleva a 1,8 millones de rands (254.000 dólares).
El técnico brasileño, que había retomado el mando de la selección brasileña en el 2003, dimitió tras la eliminación de Brasil en cuartos de final de la Copa del Mundo del 2006 a manos de Francia (1-0).
Parreira tiene ya experiencia en el fútbol africano, ya que fue entrenador de Ghana a finales de los años '60.