Cobreloa queda al borde del precipicio en la Libertadores

SANTIAGO.- Pese a tener numerosas ocasiones de gol para revertir su suerte, el conjunto de Cobreloa dejó partir gran parte de sus opciones de avanzar al Grupo 5 de la Copa Libertadores, al caer en el estadio Municipal de Calama por 2-0 frente al conjunto brasileño de Paraná.

Los naranjas tendrán que jugarse todas sus chances el próximo 7 de febrero, cuando deban enfrentar nuevamente al cuadro paranaense en el partido de vuelta por esta fase previal del certamen continental.

Un balde de agua muy fría recibió el conjunto dirigido por Gustavo Huerta en el césped calameño, donde los loínos confiaban en obtener un resultado que les permitiera viajar con ilusión a Brasil. Pero la solidez defensiva de Paraná, sumado a su veloz y fulminante eje de ataque, terminaron por sepultar gran parte del sueño de los mineros.

La pesadilla para Cobreloa comenzó a los 16 minutos, cuando un gran pase profundo de Dinelson encontró bien habilitado al veloz Henrique, quien superó la salida del portero Fernando Hurtado y finiquitó con comodidad el 0-1.

Cobreloa intentó recuperarse a través de dos vías: el juego aéreo y los disparos de distancia. Cuando jugaron por arriba, no hubo caso de superar la férrea y espigada defensa brasileña, donde destacó la solidez de Marques y Neguette. Los remates de distancia, en tanto, causaron más daño en su rival, pero la gran tarde del experimentado portero Flavio apagó las ocasiones.

Tras la ventaja, los brasileños intentaron bajarle la intensidad al juego y no evitaron el uso del juego brusco para cortar las mejores jugadas de Cobreloa, lo que generó un gran número de balones detenidos que los naranjas nunca supieron aprovechar. Sólo un disparo de Díaz, manoteado por Flavio, pudo más posibilidades de llegar a la red.

En la segunda etapa los locales mostraron aún más ímpetu por llegar al área rival e incluso el técnico Huerta se la jugó a los 66' realizando sus tres cambios a la vez. Paraná, por el contrario, mantuvo su receta: cerrarse atrás y jugarse sus opciones en el contragolpe.

El despertar de Paredes fue a chispazos, pero cuando jugó su mejor fútbol fue cuando su equipo estuvo más cerca del empate. Sus remates exigieron a Flavio y sus habilitaciones -a Díaz, Barrios o Mannara- fueron un importante dolor de cabeza para la escuadra visitante, pero no lo suficiente como para emparejar la balanza en el marcador.

La herida en Calama se abrió más cuando a los 87', el suplente Josiel se sacó como si nada la marca del defensor Cristián Olguín y sacó un preciso remate cruzado que dejó mudo al portero Hurtado. Era un 0-2 que caló hondo y que deja a los naranjas con un pie afuera del sueño copero.