Primer Ministro de Italia prometió cambio radical en el fútbol

ROMA.- El jefe del gobierno italiano, Romano Prodi, anticipó hoy que se adoptarán medidas más severas para "modificar radicalmente la situación" actual en el fútbol tras la muerte de un policía en el clásico siciliano Catania-Palermo.

"El lunes, el ministro del Interior, Giuliano Amato, y la ministra de Deportes, Giovanna Melandri, se reunirán para evaluar ideas para un dispositivo a largo plazo que modifique radicalmente la situación", declaró el premier en Bolonia.

"No debemos tener ninguna indulgencia frente a la violencia. Nadie puede decir que en Catania no había suficientes policías o fuerzas del orden entrenadas. Quiere decir que con esto no alcanza", explicó Prodi. "No podemos poner permanentemente en peligro la vida de los agentes de policía. Se tienen que responsabilizar también los clubes de fútbol para cambiar la situación, porque no se puede continuar de este modo", subrayó.

"Lo que ocurrió en Catania no fue un hecho aislado y es un hecho gravísimo. Hay que reaccionar. No se pueden tolerar más estas cosas", subrayó el jefe de gobierno. Para Prodi "no se trata de hinchas, porque los hinchas son pacíficos y no violentos. Estos son tipos violentos y deben ser aislados". "Debemos intervenir con instrumentos adaptados e inteligentes porque estoy convencido de que estas bandas de vándalos siempre pensaron que gozaban de protección o que actuaban en un contexto con el que algunos estaban de acuerdo", agregó.

"Es necesario romper con esta idea. El fútbol es el deporte más popular de Italia y es necesario comprender que existen verdaderos valores en el fútbol, no sólo el de la victoria, sino el de la civilización", dijo el primer ministro.

Prodi avaló la decisión de la Federación Italiana de parar el fútbol por tiempo indeterminado tras el asesinato del policía Filippo Raciti, en las adyacencias del estadio Massimino de Catania durante enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los fanáticos locales, que dejaron además decenas de heridos.

El premier aseguró que mientras dure la suspensión en el fútbol habrá que aprovechar el momento "para meditar y reflexionar. La gente debe entender que es hora de un vuelco. El país se tiene que dar cuenta que también en el deporte, o quizás en este período histórico sobre todo en el deporte, se expresa la civilización, la madurez y la seriedad de nuestra nación".

Cuando los cronistas le pidieron una opinión sobre la eventualidad que el campeonato pueda detenerse por largo plazo, Prodi respondió: "Repito, el lunes se comienza una reflexión sistemática de parte del gobierno". Amato, en tanto, coincidió en que "cada semana hacemos arriesgar la vida a jóvenes, muchachos y hombres por explosiones absurdas, sin sentido, con el máximo de irresponsabilidad y violencia" en el fútbol.

"Ahora basta, la violencia existe en todas partes, pero en las canchas, en relación con un juego, es inadmisible", agregó Amato en declaraciones a la televisión pública Rai. "Han hecho muy bien en parar el campeonato y cuando se reanude mis policías no deben correr los riesgos que corrieron hasta ahora", concluyó el ministro del Interior, que junto a su colega Melandri, fue encargado por Prodi de elaborar un plan de acción severo para parar con el fenómeno de violencia en el fútbol.

"Muchos delitos cometidos por jóvenes hoy son caracterizados por una tasa de violencia que no conocíamos en el pasado. Seguramente existe una incomodidad social en todo estoo que de ciudad a ciudad puede tener razones diferentes, pero esta violencia es de todos modos inadmisible y se trata con curas sociales, con educación y también con castigo", afirmó Amato.

"Hay que ponerles límites a estos jóvenes, deben entender que lanzar bombas, tener palos en sus manos, tener armas impropias es algo que no puede ser permitido y tenemos que hacérselo entender", agregó. El ministro del Interior declarará el martes ante la Cámara de Diputados sobre los graves episodios ocurridos en Catania.Por su parte, la municipalidad de esa ciudad proclamó hoy una jornada de duelo.