La Conmebol decidió mantener el mismo fixture con que se han jugado las últimas clasificatorias mundialistas, para enfrentar el proceso de cara al mundial de Sudáfrica 2010.
El calendario incluye nueve fechas dobles, en exactamente el mismo orden utilizado para las eliminatorias de Japón-Corea 2002 y Alemania 2006.
Sólo falta determinar el mes de inicio del proceso, que sería en septiembre u octubre, ocasión en que la selección chilena deberá enfrentar a su similar de Argentina en Buenos Aires.
La determinación constituye una derrota para las aspiraciones chilenas y de la ANFP, cuyo presidente se manifestó a favor de modificar el calendario. "Recibimos la noticia de la mejor manera, no hay nada que hacer. La mayoría opinó que no era momento para cambios, y no nos queda más que trabajar muy fuerte para poder clasificar", dijo el presidente del fútbol chileno Harold Mayne-Nicholls a radio Bío-Bío.