Audax saca empate al Sao Paulo en su debut por la Libertadores

SANTIAGO.- Un meritorio empate logró el cuadro de Audax Italiano en su primer partido en la historia por la Copa Libertadores de América, al igualar 0-0 frente al Sao Paulo, actual subcampeón del torneo continental, en el encuentro disputado esta noche en el estadio San Carlos de Apoquindo.

Con el portero Nicolás Peric transformado en principal figura, el equipo dirigido por Raúl Toro sumó su primer punto internacional frente a un rival de fuste, que tuvo las principales ocasiones de gol en un encuentro donde no hubo demasiadas chances claras.

El equipo itálico, que tenía como única experiencia internacional su participación en la Copa Conmebol de 1998, salió con la frente en alto para jugar sin nervios ante el cuadro brasileño, con lo que incluso en algunas pasajes del partido logró transformarse en protagonista.

Sin embargo, fue el equipo paulista el que llegó con más profundidad, aunque excediéndose en buscar por la vía aérea, donde los itálicos -y especialmente su portero Peric- no falló.

El portero formado en Rangers fue especialmente vital en dos ocasiones: cuando a los 43 minutos de la primera etapa logró volar hasta un ángulo para manotar un tiro libre de su colega Rogério Ceni; y cuando a los 65' protagonizó una triple tapada frente a los paulistas Aloisio y Leandro.

Las mejores oportunidades para Audax se produjeron con balones parados que Carlos Villanueva no pudo aprovechar, además de una entrada de Boris Rieloff por izquierda que por poco llega a los pies de Franco di Santo, pero que finalmente tuvo como destino las manos del sólido portero Rogério Ceni.

Los itálicos desplegaron buen físico y muchas ganas, aunque por momentos se quedaron algos cortos de fútbol para equilibrar un partido ante un equipo muy superior en el aspecto técnico, pero que no pudo solucionar el puzzle planteado por el cuadro verde.

Para Audax fue un debut como para no retirarse del campo con la cabeza gacha, por el buen despliegue que realizó sobre el césped de San Carlos de Apoquindo, donde logró controlar a un equipo con mucha más experiencia internacional y tres títulos continentales en su palmarés.