BUENOS AIRES.- El peruano Luis Horna venció al argentino David Nalbandian, máximo favorito del torneo de tenis de Buenos Aires, donde hoy hicieron honor a su condición de favoritos el español Carlos Moyá y el argentino Guillermo Cañas.
En el partido inaugural del Grupo 1 del round robin, bautizado como "zona de la muerte" por el nivel de sus integrantes, Horna, 50 del ranking, se impuso a Nalbandian, número diez del mundo, por 6-4 y 6-3, y quedó como líder del grupo que se completa con el ascendente Cañas.
"Fue uno de los triunfos más importantes de mi carrera. Abrir el torneo con una victoria sobre David, que es un crack, es muy importante", señaló Horna, quien hace poco más de dos semanas ganó el título de Viña del Mar.
Nalbandian, en su primer partido sobre arcilla desde septiembre, hizo casi todo mal ante unos 6.000 espectadores que colmaron las gradas del Buenos Aires Lawn Tennis Club con el objetivo de ver a su ídolo. En contraposición, Horna sacó provecho de todas las oportunidades, y en el larguísimo último game del partido no le tembló el pulso y convirtió su tercer match point en victoria.
Por obra y gracia del round robin, Nalbandian todavía tiene chances de avanzar a cuartos de final: para ello deberá derrotar este miércoles a Cañas -en lo que muchos califican de una final anticipada- y esperar luego que su compatriota venza a Horna el jueves. Entonces, los sets o el porcentaje de games definirían el pasaporte.
A diferencia de Nalbandian, Moyá y Cañas hicieron bien los deberes. El español, que busca su "tetracampeonato" en suelo argentino, se impuso al italiano Potito Starace por 6-4 y 6-4, y quedó como líder del Grupo 2 del round robin, fase a la que hoy clasificó Cañas al superar a su connacional Juan Pablo Guzmán por 7-6 (7-4) y 6-3.
Otro favorito que mordió el polvo de la derrota fue el argentino y tercer preclasificado Agustín Calleri, que cayó ante el español Albert Montañés por 6-7 (4-7), 6-4 y 6-4, por el Grupo 6.
En cambio la jornada terminó en sonrisa para el ecuatoriano Nicolás Lapentti, que superó al francés Nicolas Devilder por 6-3, 2-6 y 6-3 (Grupo 8), el español Nicolás Almagro, cuarto favorito y verdugo del argentino Martín Vassallo-Argello por 7-5 y 6-4 (Grupo 3), y el italiano Alessio Di Mauro, que batió al español Rubén Ramírez Hidalgo por 6-4 y 7-6 (10-8) (Grupo 5).
Además de Cañas, también el brasileño Flavio Saretta se aseguró un lugar en el round robin, en el Grupo 6, al vencer al checo Lukas Dlouhy por 6-3 y 6-1 en otro de los partidos pendientes de la ronda de eliminación.
"Lunes Negro"
El "lunes negro" de la víspera -con poca gente en las gradas del Buenos Aires Lawn Tennis Club y un pobre programa de partidos- dejó paso a este "supermartes" en el que Moyá y Cañas le dieron la razón a aquellos que los cuentan entre los favoritos.
Moyá desplegó su mejor juego sobre la arcilla del court central y le bastó un quiebre en cada set para imponerse por primera vez en su carrera a Starace, que tenía un récord favorable de 2-0 en cotejos entre sí.
"Fue un partido difícil, porque él ya había ganado ayer y llegó con más ritmo, pero me he notado bien desde el principio y aproveché mis oportunides para vencer", explicó el mallorquín, quien en Buenos Aires ganó el primer torneo de su carrera, en 1995, luego repitió en 2003, y en 2006 obtuvo su último cetro hasta el presente.
El defensor del título, que el jueves buscará ante el argentino Juan Mónaco asegurarse el pase a cuartos por el Grupo 2, es consciente de que la "química" entre él y el público argentino sigue intacta. "No es casualidad que aquí haya jugado muchas veces mi mejor tenis. Yo juego por sensaciones, y cuando la gente me apoya, mi juego se crece. Esto es Buenos Aires y quién sabe qué puede pasar", dijo en referencia a sus posibilidades de volver a gritar campeón en Argentina.
Por su parte, el local Cañas no para de ganar: 48 horas después de haberse alzado con el título de Costa do Sauípe, el primero tras su suspensión por 15 meses por doping, derrotó hoy al wildcard Guzmán y dio vida al "grupo de la muerte" por ahora liderado por Horna.
Pese al cansancio que arrastra, Cañas rebosa de confianza y es uno de los candidatos a un título que hasta ahora nunca consiguió. "Estoy haciendo las cosas muy bien, tengo la sensación de que va a ser difícil que me ganen. Lo único que me preocupa es recuperarme físicamente", señaló el argentino, que esta semana subió 44 puestos y ya se ubica en el escalón 63 del ranking, y que criticó el round robin, que lo obligó a jugar un partido eliminatorio.
Otro golpe fue perpetrado por Montañés, 75 de la ATP, quien tras cinco años de intentos fallidos por fin festejó hoy un triunfo en Buenos Aires, nada menos que ante uno de los candidatos al título, Calleri, del que se cobró revancha además de la derrota que le infligió hace apenas una semana, en octavos de Costa do Sauípe.
El jueves, Montañés intentará conseguir el pasaporte a cuartos de final ante Saretta, 133 ATP, mientras que Calleri -quien dijo que está totalmente en contra del round robin-, debido al novedoso formato tendrá una segunda oportunidad: si mañana se impone al brasileño en dos sets y luego éste derrota a Montañés, también en dos mangas, el argentino se meterá entre los ocho primeros.
Por su parte, Lapentti tuvo una alegría, tras un mes de dolor a causa de una pubalgia. El ecuatoriano, 61 del ranking de la ATP, venció en tres sets a Devilder y encabeza el Grupo 8, integrado también por el español y segundo favorito Juan Carlos Ferrero.
El ecuatoriano, que no jugaba desde su eliminación en la segunda ronda del Abierto de Australia, se mostró satisfecho por su nivel de juego y también porque la pubalgia que lo venía martirizando hoy no le afectó demasiado. "Estoy contento porque tengo ciertas molestias, pero la lesión está evolucionando bien. Y estoy pegándole a la bola mejor que nunca", señaló en declaraciones a dpa.
Este miércoles será el turno de los segundos partidos en cada grupo del round robin, en los que el perdedor del primero se enfrentará con quien aún no debutó. En ese marco, harán su presentación Ferrero y los argentinos Gastón Gaudio y Juan Ignacio Chela.
Pero el partido estelar, el que ningún hincha del tenis se querrá perder, será protagonizado por un Cañas con el ánimo en alza y un Nalbandian al que Horna lo dejó entre las cuerdas, "groggy".