Acusan al West Ham de fichar irregularmente a Tévez y Mascherano

LONDRES.- El club inglés de fútbol West Ham fue acusado  este viernes de quebrantar las reglas de la Premier League al fichar a los  argentinos Carlos Tévez y Javier Mascherano, procedentes del Corinthians, el año pasado.

Los cargos, que podrían costarle al club del Este londinense una reducción  de puntos o al menos una importante multa, están motivados por el hecho de que  una compañía inversora tuviera parte de los derechos del delantero Carlos Tévez  y del centrocampista Javier Mascherano.

"La Premier League denuncia que hubo acuerdos relacionados con esos dos  traspasos que permitieron a terceras partes adquirir la capacidad material, de influir en la política del club y/o en el rendimiento de sus equipos", lo que viola la normativa, afirmó la Premier League en un comunicado.

La liga inglesa prohíbe que los jugadores pertenezcan a terceras partes que  puedan influir en el club. Media Sports Investment (MSI), la compañía dirigida  por el empresario de origen iraní Kia Joorabchian que después protagonizó un intento fallido de compra del club, tenía parte de sus derechos.

"Además, desde el momento de los traspasos de Carlos Tévez y Javier  Mascherano, y hasta el 27 de enero de 2007 el West Ham no comunicó los acuerdos con terceras partes a la Premier League y/o deliberadamente los ocultó", añadió.

 Ninguno de los dos jugadores tuvo el rendimiento esperado en el West Ham, donde sigue jugando el Tévez mientras que Mascherano acaba de ser traspasado al Liverpool.

El West Ham piensa demostrar que los derechos que tenía MSI no influían en absoluto en el club, puesto que no sólo el entonces entrenador Alan Pardew  prácticamente no contaba con los dos argentinos sino que además el intento de  adquisición de Joorabchian fracasó.

"El club se defenderá enérgicamente de esas acusaciones y proporcionará la  respuesta detallada que reclamó la Premier League en el plazo previsto", dijo en un comunicado. Los traspasos de ambos jugadores, concluidos el último día del mercado de  fichajes en agosto de 2006, fueron negociados por dirigentes que abandonaron el club cuando lo adquirió el consorcio del actual propietario Eggert Magnusson,  quien piensa querellarse contra ellos si se demuestran las irregularidades.

Lo último que necesita en estos momentos el West Ham, que dispone de 14 días para responder a las acusaciones, es una penalización en forma de puntos  puesto que se encuentra en puestos de descenso.