MELBOURNE, (Australia).- El finlandés Kimi Räikkönen se ha convirtió en el mejor debutante al volante de un Ferrari en la historia del Campeonato del Mundo de Fórmula Uno, al haber logrado el pleno en el Gran Premio de Australia, victoria, vuelta rápida y primer puesto en la formación de salida.
Hasta ahora ninguno de los numerosos piloto de Ferrari había logrado tanto en su debut,y sólo dos habían logrado la victoria ese día, el italo-americano Mario Andretti (Ferrari 312B) y el británico Nigel Mansell (Ferrari 640).
Andretti además de la victoria en el Gran Premio de África del Sur disputado en el circuito de Kyalami, lograba también la vuelta rápida en carrera, pero lo hacía partiendo desde el cuarto puesto de la formación de salida.
El británico Nigel Mansell se imponía en el Gran Premio de Brasil de 1989, tras partir desde el sexto puesto y hasta hoya ninguno otro piloto había logrado la victoria en su debut. El argentino Juan Manuel Fangio en 1956, en su Gran Premio natal, al volante de Ferrari-Lancia D50 conseguía el primer puesto en la formación de salida, la vuelta rápida en carrera, pero no podía conseguir la victoria, porque una avería en la bomba de la gasolina le obligaba a retirare en la vuelta 22 de las 98 de que constaba la carrera.
Por último el italiano Giancarlo Baghetti logró la victoria el día de su debut en el campeonato del mundo de Fórmula Uno, algo que todavía nadie ha repetido, al imponerse en el Gran Premio de Francia de 1961 al volante de un Ferrari 156 "Sharknose".
Lo hizo partiendo desde el puesto doce de la formación de salida, pero aunque el coche estaba mantenido por la fábrica, su inscripción en la prueba la hizo la Federación de Escuderías Italianas (FISA), mientras que los tres coches oficiales los pilotaron los estadounidenses Phil Hill, que sería campeón del mundo ese año, y Richie Ghinter, y el alemán Wolfgang von Trips.