VALPARAÍSO- El Congreso aprobó hoy una ley que resguarda los derechos de los futbolistas ante los clubes, iniciativa que se suma a la ley de sociedades anónimas ya vigente, y que busca eliminar abusos y desigualdades laborales.
Al nuevo estatuto laboral para los futbolistas, que fue enviado por el gobierno al Congreso el 2002, ahora sólo le resta ser promulgado como ley por la presidenta, Michelle Bachelet, luego de la aceptación unánime de la Cámara de Diputados a las modificaciones que le hiciera el Senado.
El ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, reconoció que el nuevo marco jurídico permitirá poner a los futbolistas a la par del resto de los trabajadores del país.
"La situación del fútbol profesional cambia radicalmente, lo que teníamos hasta ayer, antes que este proyecto (...) era una situación de absoluta desregulación desde el punto de vista laboral y de absoluto desmedro de los beneficios que son propios de cualquier trabajador", dijo Andrade al término de la sesión.
La ley incluye contratos de trabajo por un mínimo de un año y un máximo de cinco. En Chile, los clubes podían contratar a un futbolista por seis meses, lo que dura un torneo. Los jugadores, además, obtendrán un porcentaje obligatorio de los montos transados en sus traspasos a otros clubes, el cumplimiento en el pago de las remuneraciones en forma mensual y el respeto de los días libres, entre otros derechos.
"Hemos dado un nuevo paso hacia la profesionalización de la actividad y a través de eso debemos ir paulatinamente mejorando nuestro fútbol", dijo el presidente del balompié chileno, Harold Mayne-Nicholls.
El estatuto de los futbolistas se suma a la ley de sociedades anónimas deportivas profesionales (SADP), que entró en vigencia en noviembre del 2006, en momentos en que algunos clubes se encontraban al borde de la quiebra financiera. Las SADP permitieron que las entidades deportivas adoptaran nuevas formas de administración que contemplan sociedades anónimas, cotizar en la bolsa u optar por el financiamiento a través de fondos de inversión.
"El fútbol era manejado de una forma muy informal y este es el complemento a la ley de sociedades anónimas deportivas. Lo más importante es que terminamos con esos abusos que se cometían a los jóvenes con contratos prorrogables", dijo el presidente del sindicato de futbolistas (SIFUP), Carlos Soto.