Luis Pedro Figueroa tuvo problemas por su franja.
AP
GOTEMBURGO.- No hay excusas. Llegó la mejor gente. Fernández, Valdivia, Suazo, Jiménez. Brasil es superior y lo demás es sólo ilusión. Los pentacampeones se dieron un paseo en Gotemburgo y golearon a Chile 4-0, en un estadio lleno de hinchas nacionales que no dejaron nunca de apoyar a la Roja, incluso cuando el resultado ya estaba escrito.
Luis Pedro Figueroa corriendo a pedir la camiseta de Ronaldinho al término del encuentro, grafica el desnivel que hay entre uno u otro equipo. Brasil colmado de figuras mundiales como el volante del Barcelona, Kaká, Robinho, Gilberto Silva, ante un Chile que vivió más de una ilusión de acercarse a uno de los mejores equipos del planeta, pero que en la práctica aún está muy lejos de eso.
Y no fue mucho lo que se avanzó después del último encuentro de ambas selecciones por las eliminatorias a Alemania 2006, cuando los verdeamarellos derrotaron a la escuadra de Acosta 5-0.
Hoy la Roja jugó con su mejor gente y con un esquema novedoso para lo que le gusta hacer a Acosta con sus equipos en ofensiva. Suazo solo en el área no recibió nunca un balón con ventaja. Lo más cerca estuvo cerca de los 20 minutos cuando Fernández lo habilitó de taco, pero el delantero de Colo Colo no quedó en posición de gol y el balón se le fue desviado. Fue lo más peligroso de los chilenos en el primer tiempo. Lo demás, sólo tocar hacia el lado, con dos volantes ofensivos que no pisaron el área rival. Mark González y Luis Pedro Figueroa fueron una sombra en el Nya Ullevi Stadium.
Punto aparte para Matías Fernández. El jugador del Villarreal, en lo poco que pudo entrar en juego, se vio muy enredado, sin chispa y casi no tocó el balón. Además, cuando lograba tenerlo, le doblaban la marca y no podía ante la marca de Gilberto Silva que lo tuvo siempre de espalda al arco. Lo grafica su melor jugada: un taco a Suazo.
Con un Chile sin ideas, apareció Brasil y sus mejores hombres que cuando se atrevían a encarar desordenaban toda la defensa chilena muy mal parada y sobrepasada por la habilidad de los brasileños.
Von Schewdler fue lejos el más bajo. Muy inocente, mal ubicado y sin personalidad. Justamente fue el ex central de la Universidad de Chile quien cometió el infantil penal que abrió la ruta para la goleada, después de derribar en el área a Juan. Ronaldinho se puso frente a Bravo y la mandó adentro a los 15.
Con el 1-0 en contra Chile fue bajando más su nivel y seguía sin llegar al arco de Julio César. A los 30' arranca Alves por la derecha, sin marca, saca el centro y en el borde del área chica llega Kaká para de primera anotar el 2-0.
Aplastante primer tiempo. En la segunda etapa Acosta se la jugó. Sacó a Von Schwedler y puso a Navia y dejó en los camarines también al opaco Matías Fernández e hizo ingresar a Valdivia. El jugador del Palmeiras se vio bien y en sus primeras jugadas insinuó algo, pero se fue diluyendo al correr de los minutos.
Poco duró el entusiasmo con Valdivia en la cancha, porque a los 49' otra vez Ronaldinho, ahora de tiro libre, ante una barrera mal ubicada, puso el 3-0. Diez minutos más tarde, Juan aprovechó un balón que picó en el área y colocó el 4-0 definitivo.
Chile sin luces no pudo más y sólo esperó que pasaran los minutos. Al final, cuando se cumplían los 90 minutos un puñado de hinchas brasileños invadieron la cancha para saludar a sus ídolos. El juez decidió terminar el partido con lo que se acabó también la ilusión chilena de hacer historia.
Ahora el equipo de Acosta esperará botar el mal resultado la próxima semana ante Costa Rica en Talca.
Formaciones
Chile: C. Bravo; J. Vargas, I. Fuentes, A. Von Schwedler (46', R. Navia); L. P. Figueroa, C. Maldonado, A. Sanhueza, M. González (78' M. Iturra), ; M. Fernández (46', Jorge Valdivia), L. Jiménez (78', R. Tello); y Humberto Suazo.
DT: Nelson Acosta
Brasil: J. César; D. Alves, Lúcio, Juan, Gilberto (76', Dudu Cearense); G. Silva, Elano, Kaká (79', Diego), Ronaldinho; Robinho y Fred (75', V. Love).
DT: Dunga.