LAUSANA.- El principal tribunal deportivo del mundo ordenó que se reconsidere el fallo en relación al dopaje del tenista argentino Guillermo Cañas, que se registró luego de un torneo disputado en México el 2005 y que mantuvo al jugador alejado de las canchas por 15 meses.
"Recibimos información de que el Tribunal Federal Suizo ha decidido anular el dictamen", expresó el secretario general del Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAD), Matthieu Reeb.
"Esperaremos a ver cual es el sustento del fallo, que todavía no conocemos. Luego analizaremos las razones y en las próximas semanas decidiremos qué hacemos", añadió.
Esta es la primera apelación exitosa a un fallo del TAD, que ha lidiado con 750 casos desde su creación hace 23 años.
El tribunal suizo tiene jurisdicción sobre el proceso de apelación, pues el TAD se encuentra en Lausana. Se espera que la junta de tres miembros del TAD que analizó el caso de Cañas vuelva a reunirse en los próximos meses.
"Damos por sentado que tendremos que reconsiderar el fallo según las directrices que dé el tribunal federal. Podríamos confirmar la sanción inicial, reducirla o declarar que el deportista no fue culpable de infracción alguna", dijo Reeb. Cañas, según acotó, podría acudir nuevamente al tribunal suizo si no está satisfecho con el dictamen.
La ATP suspendió a Cañas por dos años tras hallársele un diurético en ocasión de un torneo en Acapulco, el 21 de febrero del 2005. En mayo del año pasado le redujo la pena a 15 meses por considerar que había atenuantes.
El TAB dijo que el equipo médico del torneo le había suministrado medicinas equivocadas, pero que Cañas era parcialmente responsable por ingerir "medicinas sin revisar su contenido, pese a saber que habían pasado por varias manos antes de llegar a las suyas". Cañas negó haber ingerido sustancias prohibidas a sabiendas. Los diuréticos son usados a veces para disimular la presencia de esteroides y otras sustancias prohibidas.
Cañas llegó a estar octavo en el mundo antes de su suspensión. Regresó a la actividad a mediados del año pasado y ha estado escalando posiciones aceleradamente. En marzo venció dos veces al número uno del mundo, el suizo Roger Federer, y el domingo perdió la final del Masters de Key Biscayne ante el serbio Novak Djokovic.
