BUENOS AIRES.- Una multitud de hinchas del River Plate reclamó la dimisión al entrenador Daniel Passarella, quien dijo que entiende las reclamaciones pero que no está dispuesto a abandonar su cargo.
Passarella fue recibido con silbidos y abucheos cuando salió al campo de juego el domingo en el estadio “Monumental” con el equipo que igualó con Belgrano de Córdoba (1-1), fue hostigado durante los 90 minutos y despedido con insultos.
La eliminación de River de la Copa Libertadores de América tras dos derrotas ante el venezolano Caracas FC y su pobre rendimiento en el torneo Clausura 2007 argentino han crispado a la hinchada, que también pide la renuncia de Jose María Aguilar, presidente del club desde hace tres años, período en el que el equipo no ha ganado ningún título.
Los más exaltados insultaron a los jugadores, especialmente a aquellos que perdieron fuera de casa ante el Caracas la semana pasada, la mayor parte de los cuales estaba en el banquillo.
River Plate, con alrededor de 30 millones de dólares en fichajes de jugadores, es el equipo argentino que más ha invertido en el comienzo del año para la disputa de la Libertadores y el torneo local, en el que quedó rezagado a seis puntos de distancia de los líderes Boca Juniors y San Lorenzo.
De los últimos seis puntos que disputó en su estadio, el equipo riverplatense sólo obtuvo uno a causa de una derrota ante el modesto Gimnasia y Esgrima de Jujuy (0-1) y el empate frente a Belgrano.
Los insultos “me duelen, pero no voy a bajar la cabeza, voy a seguir trabajando. No me voy a ir,” afirmó Passarella en una rueda de prensa ofrecida tras el partido.
La prensa deportiva local coincide en que un resultado negativo el próximo domingo ante Boca Juniors, el histórico rival de River Plate, podría terminar tempranamente con el ciclo de Passarella en el club, con el que tiene contrato hasta diciembre de 2009.
Passarella renovó su contrato con River el pasado 1 de febrero con un aumento del cien por ciento con respecto a lo que ganaba en 2006.
Lista negra
Otros técnicos con problemas son los de Racing e Independiente, Reinaldo Merlo y Jorge Burruchaga, respectivamente, cuyos equipos cumplen pobres campañas en el Clausura.
Racing perdió en su estadio el viernes con Gimnasia y Esgrima de Jujuy (0-1) y poco después Merlo dijo que “sólo muerto” lo sacarán de su cargo ante la reclamación de un hincha que le pidió a los gritos su dimisión.
El equipo albiceleste, penúltimo en la clasificación, ha logrado sólo seis puntos en ocho partidos disputados.
Independiente fue aplastado el domingo por Gimnasia y Esgrima La Plata (4-1) y Burruchaga, de acuerdo con los dirigentes, no compareció ante la prensa, que considera inminente su renuncia.
El equipo “rojo” obtuvo hasta ahora 8 puntos.