BUENOS AIRES.- El ex futbolista argentino Diego Maradona está a punto de recibir el alta del sanatorio donde está internado desde hace 13 días con una intoxicación alcohólica, informaron fuentes médicas.
Maradona, de 46 años, podrá dejar la clínica "en las próximas horas, a raíz del estado general" de salud, mientras supera una hepatitis causada por consumo de alcohol, dijo el director del instituto médico, Héctor Pezzella.
Sin embargo, el único parte médico diario oficial del sanatorio con las últimas novedades es esperado para esta noche.
El ex capitán de la selección argentina fue hospitalizado en una sala común con un cuadro de intoxicación, aunque los médicos temían al principio complicaciones más graves, que posteriores estudios desestimaron.
"Esto será largo. No se puede hablar de alta definitiva, porque esto será un largo camino", dijo a la prensa su médico personal, Alfredo Cahe. El especialista afirmó que "Diego está haciendo un 'click' (tomar conciencia) y recién ahora entró en el análisis de sus verdaderos problemas".
El médico ha manifestado a la familia del ex futbolista que debería viajar a Suiza para llevar adelante un tratamiento integral, según versiones de prensa.
Por el momento, el hombre que estuvo al borde de la muerte en 2004 por un severo cuadro cardiovascular, se alimenta por sus propios medios, camina por la habitación y recibe visitas familiares. En las últimas horas se encontró con su ex esposa, Claudia Villafañe, además de sus hijas Dalma y Giannina.
"Antes nos miraba con escepticismo, ahora escucha cuando le damos explicaciones. Diego está tomando conciencia de sus verdaderos problemas", dijo Pezzella.
Maradona venía sufriendo desórdenes en sus hábitos alimenticios y excesos en las bebidas, pero nada se supo oficialmente sobre si pudo superar sus adicciones a las drogas peligrosas.
En 2005 se sometió a una drástica operación gástrica y su recuperación le permitió convertirse en un éxito televisivo como animador y también jugar torneos de showbol, una variedad del fútbol sala, junto con viejas glorias.
