BUENOS AIRES.- "Diego es ingobernable. No le da bola a nadie. Tiene una personalidad compulsiva a hacer a full todo lo que encara", explicó Coppola, quien hace tres años que ya no está al lado del ex 10 del Napoli, Barcelona, Boca, Argentinos Juniors y la selección argentina.
Asimismo, el empresario pidió a la prensa que se "dejen de hablar siempre del tema del entorno. Diego está por cumplir 47 años y es responsable de sus actos". En declaraciones a Radio Mitre, Coppola dijo que se siente aún "amigo de Diego", y comentó que le gustaría acercase a él, para "darle un beso", pero recordó que cuando el ex jugador estuvo internado en 2004 sus familiares le prohibieron acercarse.
"Diego tiene una personalidad compulsiva en todo lo que hace. Cuando juega al fútbol lo hace a full, y lo mismo le pasó con la comida, ahora con el alcohol, y más atrás, con la droga", opinó Coppola.
El hombre que manejó la carrera de Maradona durante 20 años se preguntó: "¿Cómo fue que abandonó el Sanatorio Gemes si no estaba todavía bien?", a lo que agregó que a su criterio fue el propio ídolo el que se quiso ir y señaló que lo hizo "porque es ingobernable".
Coppola defendió igualmente al médico personal de Maradona, Alfredo Cahe. "Yo sé lo que siente por Diego y todo lo que se ha bancado, y lo que hizo y hace por él".
El ex manager se negó a aventurar si Maradona debe encarar un tratamiento psiquiátrico. "Yo no quiero opinar estando lejos, pero creo que debe haber algún profesional idóneo que diga qué es lo más apropiado en este momento".
"Yo siempre voy a ser amigo de Diego. No sé cuando empezó con el alcohol. Con los habanos comenzó en Cuba y creo que los primeros cigarros se los regaló el Comandante Fidel Castro. Pero él en esa época fumaba y bebía muy poco", agregó el ex apoderado.
Maradona se encuentra internado desde la madrugada del viernes en una clínica privada de Buenos Aires, debido a una recaída en su estado de salud, pocos días después de haber recibido el alta de otro sanatorio por haber sufrido una ingesta tóxica de alcohol.
El ex astro argentino está alojado en una sala de terapia intensiva y según el último parte médico, entregado ayer, su estado es "estable".