Roger Federer sirve desde la arcilla, mientras Rafael Nadal espera atento parado sobre el césped. Una postal de una exhibición única.
AFP
SANTIAGO.- El tenista español Rafael Nadal (2° ATP) salió airoso en la llamativa y emocionante "batalla de las superficies" realizada en Palma de Mallorca, donde superó al suizo Roger Federer (1°) por 7-5, 4-6 y 7-6(10).
El encuentro, disputado sobre una cancha mixta mitad césped y mitad arcilla, fue jugado con intensidad y gran despliegue de talento por parte de las dos mejores raquetas del mundo, que presentaron un amplio repertorio tenístico en la exhibición jugada ante unas 7 mil personas.
Nadal comenzó mejor el partido ante un Federer que tardó en acostumbrarse a su superficie favorita, el césped, donde inicialmente se mostró algo lento e incluso fue quebrado en el cuarto juego.
El suizo logró recuperarse en el séptimo juego, cuando su rival era el que pisaba la hierba, pero finalmente se inclinó en 44 minutos de acción tras volver a ser quebrado en el duodécimo parcial, otra vez sirviendo sobre césped.
Mientras los jugadores cambiaban de lado, superficie y hasta zapatillas cada dos juegos, el público seguía con emoción el accionar de los dos ídolos. En la segunda manga, fue el turno de lucirse para Federer, quien de entrada le quebró a Nadal en arcilla.
El helvético administró su ventaja en una presentación que incluyó potentes derechos esquinados y bolas muy sutiles ubicadas cerca de la red. Federer voleó con fuerza e incluso jugó un par de globos de antología. Tras el 6-4 a favor del suizo en 36 minutos, llegó un tercer set donde la emoción fue el principal ingrediente.
Nadal le quebró a Federer -en arcilla- en el cuarto juego, pero todo lo bueno que había mostrado lo desaprovechó un parcial más tarde, donde falló bola tras bola para quedar 0-40 y permitir al suizo recuperar el rompimiento.
Los tenistas no volvieron a ceder su servicio hasta que llegaron a un espectacular tie-break, donde Federer tomó la palabra con rápidos rompimientos que lo llevaron a tener una ventaja de 4-1.
A poco de celebrar una victoria, el suizo se derrumbó ante los golpes de Nadal, quien alentado por el público español logró revertir espectacularmente la cuenta para ponerse 6-5 y con el servicio a su favor. Insospechadamente, el hispano cometió una doble falta y perdió su primer punto de partido.
Ambos tenistas mostraron su mejor tenis en un partido que, pese a ser exhibición, fue tomado bastante en serio. Fue así como llegaron a estar 10-10 en el desempate, hasta que Nadal desniveló a su favor y logró el punto ganador cuando Federer estaba en su propio hábitat, el césped. Una bola rasante le jugó una mala pasada al suizo, que quedó mordiendo la derrota en este ingenioso match-desafío que satisfizo todas las expectativas.
