Gronholm toma ventaja en el Mundial de Rally.
AFP
OLBIA, (Italia).- El finlandés Marcus Gronholm (Ford Focus) se impuso en el Rally de Cerdeña, séptima prueba del campeonato del mundo WRC, por delante de su compatriota y compañero de equipo Mikko Hirvonen (Ford Focus) y el español Dani Sordo (Citroen C4).
Al término de la 18ª y última especial, Gronholm aventajó en 29 segundos a Hirvonen, y en 56 segundos al español Sordo, que se vio amenazado hasta el final por el noruego Henning Solberg (Ford Focus).
Gronholm se benefició del abandono del francés Sébastien Loeb (Citroen C4) después de sufrir una salida de pista en la primera especial de la 3ª y última etapa (ES13), cuando parecía que la carrera era suya.
En ese momento, Loeb estaba en cabeza de la prueba con 36 segundos de ventaja sobre Gronholm, cuando sólo restaban 50 km de especiales por recorrer. Hubiera sido la tercera victoria consecutiva de Loeb en Cerdeña.
Gronholm obtuvo su 27ª victoria en un rally del campeonato del mundo, contra las 32 de Loeb, vencedor en Montecarlo en enero y de las tres últimas carreras (México, Portugal, Argentina).
"Tenía la esperanza de ganar el rally. Eso sí, hasta que comenzó, porque después tuve problemas (un amortiguador roto en el ES5, la rueda de auxilio perdida en el ES8). Creo que sin éstos hubiese estado al mismo nivel de Loeb, y hubiéramos podido luchar hasta el final. Estaba realmente contrariado el sábado, y quedé muy sorprendido cuando me enteré este domingo de mañana que 'Seb' había cometido un error", señaló el piloto finlandés tras el podio.
Gronholm, campeón del mundo en 2000 y 2002 con Peugeot, se había impuesto esta temporada en Suecia. Con su victoria en Cerdeña se colocó como nuevo líder del campeonato del mundo, con siete puntos de ventaja sobre Loeb.
Además, este domingo el piloto sueco Daniel Carlsson y su copiloto francés Denis Giraudet quedaron excluidos del campeonato (WRC) por no haber participado en los reconocimentos del Rally de Cerdeña y haber abandonado antes de la primera especial.
A la dirección de la carrera no le agradó que Carlsson y Giraudet se saltaran los reconocimientos y "se burlaran" del reglamento del campeonato WRC tomando la salida simbólica, el jueves en Porto Cervo, al volante de su Citroen Xsara, para intentar evitar la multa en caso de baja.