Massú: "¡Mi año no es tan malo! Muchos quisieran ser 30..."

DUSSELDORF.- Vivió en la gloria hace menos de tres años al protagonizar con dos medallas de oro olímpicas el mayor éxito de la historia deportiva chilena, pero 2007 no ha sido generoso en resultados para el tenista chileno Nicolás Massú, que se rebela ante las críticas.

"La gente también habla mucho... En mi país dicen que he tenido un año muy malo, y en la Carrera (de Campeones) soy 30. Si el año termina ahora soy el número 30. No es un año tan malo! No sé a cuántos jugadores en el mundo les gustaría estar número 30...", dijo Massú en Düsseldorf, donde disputa la Copa Mundial por Equipos.

Número nueve del mundo en septiembre de 2004, Massú está hoy 40 puestos detrás de ese hito, en el número 49. A sus 27 años confiesa no tener el mismo tipo de motivación que a los 18, pero quiere recuperar su juego para volver a ser "top ten". Y acaricia un sueño: tener a Marcelo Ríos alguna vez como capitán del equipo de Copa Davis chileno.

-¿Es Roland Garros, que comienza el domingo, su gran momento en este gira?

"Tampoco es tan, tan así, que te tiene que ir bien en Roland Garros, aunque ese sea el torneo más importante para un sudamericano. Hay que ir tranquilo, no estresado, porque también te puede tocar un jugador mejor que tú. A París he llegado en buenos momentos y en malos momentos. En 2005 tras una operación perdí en primera ronda, obviamente las expectativas no eran muchas. En 2006, que tenía muchas expectativas, hice un muy buen torneo, le gané a Malisse, a Mirnyi y le hice casi el partido más difícil del torneo a Federer, 7-6 en el cuarto. Tuve break para ir al quinto con Federer...".

-¿Qué sería un buen Roland Garros?

"Primero pienso en hacer un cuartos de final, y luego en el resto".

-¿Siente nostalgia de sus grandes momentos en 2004?

"Si yo pensara que no puedo volver a estar donde estuve no jugaría tenis. No puedo tener una mentalidad tan mediocre de sentirme bien estando 49. Yo fui nueve del mundo, gané torneos importantes y lo que me interesa ahora es volver a estar entre los 20 y luego, tranquilamente, empezar a pensar en algo más grande".

-Pero su temporada 2007 no es la que esperaba. Exceptuando la final en Viña del Mar no tuvo grandes resultados.

"Todo es relativo, la gente es muy exitista en mi país siempre, y lo entiendo, porque he estado mucho más arriba. La gente piensa que estoy mal, pero estoy 30, hay sólo 29 tipos mejores que yo. ¡No es tan malo! No es lo que yo espero, ni lo que quiero. No estoy conforme, claro que no. Pero si el año terminara ahora sería 30 del mundo, y no sé si es tan malo serlo. Son muy pocos los tenistas que tienen un tenis que les permite estar arriba todos los años. Federer y Nadal, no muchos más".

-¿Aprendió a controlarse para que ese exitismo no lo afecte?

"A veces uno se presiona uno mismo, no depende de la gente. Hoy veo mi ranking 49 y me enojo conmigo mismo, quiero comerme el ranking y llegar lo más lejos posible arriba. Pero a veces no se puede, surgen jugadores más jóvenes, más fuertes. Me falta ser un poco más regular, he perdido partidos con jugadores que fueron mejores. En Roma perdí un partido que tenía ganado, la semana pasada con Safin había ganado el primer set, y esos son los puntos que vas sumando y te ponen más arriba. En Miami e Indian Wells jugué muy mal".

-¿Pero le sigue gustando ser tenista?

"Me encanta lo que hago, obiviamente la motivación de hoy es diferente a la de los 18 años. Mi motivacion hoy es volver a estar entre los diez primeros del mundo".

-Da la impresión de que usted y Fernando González nunca se ponen de acuerdo. Cuando uno sube, el otro baja, pero nunca están los dos arriba.

"(Ríe) Creo que hubo un año que estuvimos los dos como 20, pero la explosión de Fernando en estos dos últimos años es difícil de lograr. Llegó a finales de Grand Slam, de Masters Series, jugando bien en forma constante en torneos importantes. Ojalá que pronto yo pueda hacer lo que está haciendo él ahora".

-¿Hay algo en el tenis chileno tras Massú y González?

"No conozco mucho, sólo a los que están acá jugando con nosotros en Düsseldorf. Quizás están un poco más atrasados, no han tenido los resultados que tuvimos nosotros o el Chino Ríos. Pero hay que ayudarlos, creo que al tenis chileno no se le ha sacado todo el provecho que se le podría haber sacado".

-¿Por qué?

"Los ex jugadores... Eso es lo malo en Chile, los que fueron algo o alguien no se dedican a ser entrenadores porque no les interesa. Y eso es importante, porque en Chile hay entrenadores pero no tienen la experiencia de haber jugado como nosotros. Digo por ejemplo Gabriel Silberstein, Sergio Cortés, Hans Gildemeister, Pato Cornejo, Jaime Fillol. Todos se relacionan con el tenis, pero no viajan. No digo que esté mal, porque quizás yo el día de mañana haga lo mismo por estar saturado de viajar. Eso falta, por eso quizás en Argentina hay tantos jugadores, porque los ex jugadores, al no ser fácil encontrar trabajo, se dedican a entrenar y les enseñan mucho más a los jugadores. Ojalá el día de mañana me pueda seguir dedicando al tenis porque creo que es lo mejor que puedo aportar a mi país".

-Entre esos ex jugadores no nombró a Marcelo Ríos. ¿Debería él también colaborar con el tenis chileno?

"Creo que el Chino terminó un poco cansado del tenis, quizás ahora podría estar para capitán de Copa Davis, a futuro, cuando Hans (Gildemeister) termine lo suyo. Creo que el Chino todavía tiene que disfrutar un poco la vida, y en cinco años más quizás pensar en algo en el tenis. Tenemos un capitán con el que estoy muy contento que es Hans, ojalá que siga él, hacía tiempo que no me sentía tan cómodo con un capitán de Copa Davis. Pero ojalá antes de que yo y Fernando nos retiremos esté Marcelo como capitán, sería bonito. El Chino merece también que el tenis le dé algo, porque él le dio mucho al tenis".