RIESE.- El italiano Alessandro Petacchi, del equipo Milram, precisó de un largo y apretado esprint para imponerse ante el argentino Maximiliano Richeze, del Panaria, en la decimoctava etapa del Giro de Italia disputada entre Udine y Riese Pio X, de 203 kilómetros de recorrido, en una jornada en la que Danilo Di Luca siguió de líder.
Petacchi, que se anotó la cuarta etapa en la presente edición y la número 23 en sus participaciones en la carrera rosa, lo que le sitúa a una sola del mítico Eddy Merckx, tuvo que vaciarse en una interminable recta para obtener la victoria, ya que tanto Richeze como el danés Matti Breschel, del CSC, atacaron al italiano hasta el último centímetro.
El corredor de La Spezia invirtió un tiempo de 4h.32.51 en una etapa previsible después del martirio del Zoncolan. Las fuerzas de los corredores ya andan justas a tres jornadas del final y el pelotón marca las reglas. Así que se produjo una escapada consentida con los líderes de cada equipo a buen recaudo y a 5 kms del final es cuando se produce el reagrupamiento general para preparar la llegada masiva.
Así, la general no sufrió cambios y Di Luca, que tuvo un paseo agradable, arrancó otra hoja en el calendario, a solo tres días de alcanzar la gloria en Milán, con el único obstáculo de la contrarreloj de 43 kms del sábado con final en Verona. El líder del Liquigas mantuvo los 2.24 minutos respecto al luxemburgués Andy Schleck (CSC), segundo y flamante maillot blanco de mejor joven y los 2.38 sobre Gilberto Simoni (Saunier), tercero. El español David Arroyo siguió encaramado en la séptima plaza a 10 minutos.
Después de varios conatos de escapada, en el km.37 se formó un grupo de siete corredores cuya ventaja no superó nunca los dos minutos y medio. Lo formaban: Addy Engels (Quickstep-Innergetic), Maxim Gourov (Astana), Patxi Vila (Lampre), Franck Renier (Bouygues Telecom), Eric Berthou (Caisse d'Epargne), Pedro Horrillo (Rabobank) y Mikhail Ignatiev (Tinkoff).
El equipo Milram tiraba del pelotón, que a 50 km. de la meta marchaba a 1:40 de los fugados. Con esa diferencia la seguridad de llegada al esprint estaba garantizada. Aún así, en cabeza decidieron seguir en la lucha Engels, Renier, Gourov y Berthou, que dejaron la compañía de sus compañeros de aventura.
A 6 kms de meta se anulo la escapada y el desorden se instaló en cabeza. Los Milram no lograban imponer su tren azul, y los Tinkoff, Panaria y Credit Agricole discutían las primeras plazas. En el último km, con peligrosas curvas, nada estaba claro. Hasta que apareció Petacchi con su jersey morado lanzando un ataque marca de la casa.
Esta vez hubo respuesta, pues Richeze se puso a su altura, lo mismo que Breschel, que llegaba lanzado desde atrás. Pero la ley del más fuerte se volvió a imponer. Después de la alta montaña, Petacchi no faltó a la cita con la gloria. Con más sufrimiento que otras veces, pero de nuevo el nuevo uno de los velocistas.
Mañana de disputa la decimoctava etapa entre Treviso y Terme di Comano, de 179 kms.