VALENCIA.- Los monoplazas fórmula uno podrían alcanzar una velocidad máxima de 323,3 kilómetros por hora en los 5,4 kilómetros de distancia que tendrá el circuito urbano de Valencia, un recorrido sobre el que se circulará a una media de 201,3 kilómetros por hora.
Éstas son las primera estimaciones realizadas por los responsables del diseño de dicho trazado, que fueron anunciadas hoy por el conseller de Infraestructuras y Transporte de la Generalitat Valenciana, Mario Flores, y por el secretario autonómico de Infraestructuras, Victoriano Sánchez Barcaiztegui.
Este circuito urbano, que comenzará a construirse en octubre y se terminará el próximo mes de junio, acogerá el primer Gran Premio de Europa en otoño de 2008, discurrirá por los alrededores del puerto de la Copa del América y el área de expansión de la ciudad hacia el Puerto, concretamente las prolongaciones de la Alameda y la avenida de Francia.
Tendrá una distancia total (medida en función de la trazada que realizarán los vehículos) de 5,4 kilómetros que será recorrida en aproximadamente 1,37 minutos, con zonas en la que la velocidad de los vehículos oscilará entre los 323 y los 95 kilómetros por hora.
En total, el trazado urbano de Valencia contará con 25 curvas, once a izquierda y catorce a derecha, y dispondrá de un pavimento especial (capas de betún modificado), sin ninguna tapa de alcantarillado, que tendrá una anchura mínima de doce metros y máxima de quince, sin contar con las zonas de huida o escapatorias.
Según informaron las mismas fuentes, pese a tratarse de un recorrido íntegramente urbano, las prestaciones y medidas de seguridad serán "iguales" a las de un circuito permanente, por lo que se contempla la habilitación de zonas ajardinadas "móviles" que podrán ser retiradas para la celebración del gran premio.
La recta de salida y los boxes se situarán en el tinglado número 4 del Puerto, mientras que el "pit lane" tendrá una distancia total de 657 metros.
Así, y en el sentido de las agujas del reloj, los monoplazas rodearán la dársena por la zona en la que se ubican las bases de los sindicatos de la Copa del América, recorrerán la nueva marina, cruzarán el canal por un puente giratorio (de nueva construcción), atravesarán la marina sur y abandonarán el puerto frente al puente de Astilleros.
En este punto, el recorrido bordeará el antiguo cauce del río Turia hasta llegar a la vía férrea, donde se atravesará una curva en horquilla junto al cementerio del Grao para dirigirse a la avenida de Francia.
Esta zona será una de las más complicadas, dado el gran número de virajes que deberán acometer los pilotos, hasta llegar a la avenida Ingeniero Manuel Soto, desde la que se abordará de nuevo la recta de meta con un cerrado giro de izquierdas, el más lento de todos.
El proyecto también contempla el ensanchamiento del puente que servirá de comunicación entre la marina norte y sur, puesto que no tiene el ancho necesario. El puente levadizo existente se trasladará a la bocana y pasará a ser giratorio.
En cuanto al número de espectadores que podrán seguir la carrera desde las gradas, la organización estima esta cifra en más de 100.000, mientras que serán "más de 500 millones" los televidentes que podrán seguir el gran premio, según explicó el conseller Flores.