BOSTON.- La Liga Norteamericana de Baloncesto (NBA) se investiga a sí misma, asustada ante las denuncias de Tim Donaghy, el árbitro corrupto.
La NBA encargó al antiguo fiscal Lawrence B. Pedowitz y a su estudio de abogados que investigue sus propias actuaciones en el escándalo de los árbitros.
Donaghy, árbitro de la NBA hasta hace pocos meses, se reconoció culpable de dos casos ante un tribunal de Nueva York la semana pasada, al admitir que apostó en dos partidos de la NBA por él dirigidos, y puso además en conocimiento de ello a otras personas.
Lawrence y compañía deben analizar en los próximos días los esfuerzos de la Liga en lucha contra los juegos de azar. Además se investigarán las condiciones en que los árbitros son empleados, formados y controlados. Para ese fin, los abogados formularán preguntas a árbitros, entrenadores, jugadores y empleados de la NBA.
"Nada es más importante que la integridad de nuesto juego y la obligación que tenemos repecto a nuestros aficionados", subrayó el máximo responsable de la NBA, David Stern.
El poderoso directivo de la Liga se vio sometido el viernes a gran presión cuando Donaghy declaró a la emisora ESPN que podía nombrar hasta 20 árbitros implicados en actividades de apuestas.
Stern -que calificó a Donaghy de "rata" y "criminal aislado"- dijo tras conocerse el escándalo que no escatimaría costos ni esfuerzos "por llevar ante los tribunales a los responsables que han hecho tambalear la confianza" en la NBA.
"Para conservar la aprobación de los aficionados, se emprenderán todos los esfuezos para garantizar que nuestro modo de proceder es el mejor posible", agregó.
Según el reglamento de la NBA, sólo se permite a los árbitros apostar en carreras de caballos y fuera de la temporada de baloncesto. Asimismo, según los estatutos, pueden visitar casinos, pero no entrar en los sectores donde se apuesta.
Pero los árbitros afectados, al parecer, sí jugaron en los casinos. "Hubo afirmaciones de que más árbitros violaron las reglas de la NBA y jugaron en los casinos", subrayó el portavoz de la NBA, Tim Frank, que aseguró que sólo Donaghy apostó en los partidos que arbitraba.
Donaghy, de 40 años, se retiró el 9 de julio y podría ser condenado hasta a 25 años de cárcel y a una multa de medio millón de dólares. El juicio se reanudará el 9 de noviembre.