OSAKA.- La keniata Janeth Jepkosgei les "robó" hoy los reflectores a todos -incluida la imbatible rusa Yelena Isinbayeva- al conseguir una soprendente e histórica victoria en los 800 metros del Mundial de atletismo que se disputa en Osaka.
Fue una gran jornada para Kenia, que además copó el podio de la final de 3.000 metros obstáculos con Brimin Koprop Kipruto, Ezekiel Kemboi y Richard Kipkemboi Mateelong.
La keniata Jepkosgei dio la nota al ganar los 800 metros tras liderar la prueba de principio a fin. Fue el primer oro para el semifondo femenino de su país en certámenes mundiales u olímpicos.
Con un tiempo de 1:56,04 minutos -la mejor marca de su carrera y también de la temporada- Jepkosgei se impuso a los desesperados intentos de la marroquí Hasna Benhassi y de la tricampeona mozambiqueña Maria Mutola por darle alcance en la vuelta final.
"Ahora sé que soy competitiva. No esperaba conseguir otra mejor marca personal tras la de semifinales", afirmó la ganadora.
Finalmente, Benhassi se quedó con la medalla de plata, al igual que en los Juegos Olímpicos de 2004 y el Mundial de 2005, con un crono de 1:56,99. El bronce también fue sorpresa, ya que quedó en poder de la española Mayte Martinez, con 1:57,62. Para Mutola la carrera fue una verdadera agonía: ni siquiera pudo terminarla y tuvo que salir del estadio transportada en una camilla.
En tanto, en los 3.000 metros, Kipruto, que ganó con un tiempo de 8:13,82 minutos, se abrazó a sus compatriotas tras cruzar la meta y dio la vuelta de honor junto a ellos bajo una sola bandera keniana.
"Teníamos un plan como equipo, que era correr juntos hasta los 400 metros finales. Por eso estoy tan feliz. Esta noche celebraremos como un equipo, como un país", señaló Kipruto.
En tanto, en los 400 metros valla "Súper Félix" Sánchez no pudo plasmar su deseo de convertirse en tricampeón mundial, pese a que marcó su mejor marca anual con 48,01 y se colgó la medalla de plata.
La victoria fue para el estadounidense Kerron Clement con 47,61 segundos y el bronce para el polaco Marek Plawgo con 48,12.
Después de sus desafortunados Juegos Panamericanos en Río de Janeiro, Sánchez llegó a Japón despertando más dudas que certezas. Sin embargo, ronda a ronda su ritmo se fue acelerando, su cadencia acompasando y sus tiempos mejorando.
Primero logró 48,70, luego 48,35 y, por último, hoy estuvo a sólo un par de centésimas de meterse en el 47 que ansía. "Ojalá pueda lograrlo esta temporada. Aún me quedan cuatro competencias", advirtió.
El dominicano, que realizó una salida nula, vio pronto cómo Clement le adelantaba y ya no pudo recuperar el terreno perdido. Aunque corrió una potente última recta, el norteamericano, que pudo incluso hacer otro cambio de ritmo tras la última valla, nunca estuvo al alcance.
"Para mí es duro, después de haber ganado tantas cosas, saber cuando quedan 100 metros para llegar que sólo corres ya por el segundo", admitió. "Pero nadie pensaba ni siquiera que llegaría a la final".