Crece optimismo del equipo chileno en Tel Aviv

ISRAEL.- Poco a poco, el optimismo comienza a llegar al equipo chileno. Aunque el capitán Hans Gildemeister quiere mantener la cautela, hay dos factores que le están inyectando vibras positivas al cuadro que el próximo jueves comenzará a jugarse su permanencia en el Grupo Mundial de Copa Davis.

El primero viene, curiosamente, desde Pekín (China, 500 mil dólares, cemento). Allá el número uno de Chile, Fernando González (7°) alcanzó la final del certamen asiático luego de derrotar al croata Ivan Ljubicic (12°). Ahora se verá las caras con el español Tommy Robredo (11°), rival directo del chileno en la carrera por clasificar al Master de Shangai.

"No hay mejor entrenamiento que llegar con un gran torneo en el cuerpo, estamos muy contentos por lo que ha hecho Fernando. Esperemos que vuelva con el título, le deja la moral muy alta al equipo", resumió Hans Gildemeister para Emol.

"Ha ganado cuatro partidos muy importantes, Ljubicic es un jugador de categoría. Va a llegar aquí el lunes, tendremos dos o tres días para recuperarlo", agregó el capitán, tratando de soslayar la preocupación por el estado físico con que llegará el Bombardero a Tierra Santa.

Massú: "Sé que tengo que trabajar el doble"

El segundo factor para alimentar el optimismo es el ascendente nivel de Nicolás Massú (71°) en los entrenamientos en el Canada Stadium. El mismo viñamarino se percata de que ciertos tiros que hace una semana no salían, ahora están apareciendo.

"Me siento mucho mejor con mi derecha, con más confianza, también estoy más rápido, con más movilidad", contó Massú luego de un durísimo entrenamiento que lo dejó al borde de la fatiga.

Luego de un intenso calentamiento en que cada golpe de Massú fue ensayado, el número dos de Chile jugó tres tie breaks a 15 puntos. Del otro lado de la red, Jorge Aguilar y Hans Podlipnik jugaban dos puntos cada uno, "por eso a Nicolás siempre la bola le viene rápido, es la pelota de un jugador fresco, eso será un plus para él a la hora del partido", explicó Gildemeister.

15-0, 15-8 y 16-14 fueron los marcadores de los tres mini partidos que el pupilo de Patricio Rodríguez y Nano Zuleta. La dificultad fue creciendo conforme la fatiga se iba apoderando de Massú, quien antes del tercer lance advirtió: "juguemos algo porque o sino no me motivo".

Cuento corto, Massú se recuperó luego de estar cuatro puntos abajo y Aguilar y Podlipnik debieron subir los casi cincuenta peldaños del Canada Stadium a pies juntos. "Estamos acá para ayudar a Nicolás y al equipo, si podemos distender el ambiente y ayudar a que el trabajo de Nicolás sea más llevadero, nosotros felices. De paso, entrenamos con los mejores del mundo y eso después nos sirve", confesó el actual número 822 del plantea, que cumplirá 20 años en enero.