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Santiago: Jueves 21 de noviembre del 2024 | Actualizado 14:52
RIO DE JANEIRO.- El club brasileño Botafogo presentó hoy su nuevo técnico, Mario Sergio, después de que el anterior, Alexis Stival "Cuca", dimitiera tras la eliminación en la Copa Sudamericana, el pasado jueves, ante el River Plate argentino.
El club de Río de Janeiro indicó, en una nota de prensa, que Mario Sergio Pontes de Paiva comenzó hoy a dirigir los entrenamientos y que comandará el equipo en el encuentro de mañana que lo enfrentará al Goiás, por el Campeonato Brasileño.
Mauro Sergio entrenará con el club carioca hasta el final de esta temporada, a comienzos de diciembre. Mario Sergio aseguró, en una entrevista al portal Globoesporte, que su objetivo es conseguir que el equipo se clasifique para la Copa Libertadores de 2008, para lo que tiene que quedar entre los cuatro primeros clasificados de la liga en Brasil.
"No habría aceptado el puesto si no creyese en el potencial del equipo", declaró.
A once jornadas del final de la liga, el Botafogo es el séptimo clasificado, con 42 puntos, uno por debajo que el cuarto colocado, el Palmeiras, que marca la última plaza de clasificación a la Libertadores.
El conjunto carioca lideró el Campeonato Brasileño durante once jornadas, aunque desde que perdió la primera plaza en favor del Sao Paulo, ha acumulado una racha negativa que ha hecho peligrar el objetivo de quedar entre los cuatro primeros.
La puntilla para el anterior entrenador, Cuca, fue la eliminación de la Copa Sudamericana, en un partido ante River Plate el pasado jueves, en el estadio "Monumental" de Buenos Aires, en el que los argentinos consiguieron remontar sorprendentemente, con tres goles en los últimos 20 minutos, ante la impasibilidad de los brasileños.
Cuca, que se declaró "avergonzado" por la actitud de sus jugadores, presentó su dimisión ayer, antes de regresar de Argentina.En el aeropuerto de Río de Janeiro, un grupo enfurecido de aficionados recibió al equipo con insultos y una lluvia de palomitas de maíz y de ropa interior femenina.
Antes del Botafogo, Mario Sergio, pasó por otros importantes clubes brasileños como el Sao Paulo y el Corinthians. Su último club fue el Figueirense, con el que llegó a la final de la Copa de Brasil de 2007, en la que perdió ante el Fluminense.
