SANTIAGO.- En 1994 Rodrigo Ruiz era figura de la Unión Española. Sus goles y gambetas lo llevaron al fútbol mexicano, desde donde ya no volvió más e incluso se nacionalizó.
Tras trece años en distintos clubes aztecas, el "Pony" está a punto de sumar una marca a sus recuerdos: 500 partidos en la primera división del fútbol mexicano. Está a cinco encuentros de llegar al récord que lo convertirá en una leyenda viviente en el país norteamericano.
"Obviamente que cuando uno inicia en esto del futbol no piensa en eso, uno sólo piensa en jugar y triunfar; ahora que han pasado varios años me doy cuenta de todo lo que he hecho en el futbol, y la verdad es que estoy muy contento con mi carrera, creo que ha sido muy linda", dice.
"Cuando se me presentó la posibilidad de venir a México no lo pensé. En ese tiempo (1994) no existía la tecnología que hay ahora, sinceramente no conocía nada del futbol mexicano, pero estaba joven y quería triunfar, creo que fue una gran decisión venir" agregó.
"México me ha dado todo, realmente mi carrera futbolística la he hecho toda acá, así que le guardo un gran respeto a este lindo país; la verdad es que me gustaría quedarme a radicar aquí", expresó el chileno.
Sobre la marca de 500 partidos Ruiz le resta importancia, sabe que lo principal es hoy en día Tecos, pero también reconoce que son muy pocos los que pueden presumir esa cifra.
"La verdad es que no le doy mucha importancia a los 500 partidos, creo que lo más importante es que uno esté bien para su equipo, pero lo que es cierto, es que es una cifra importante, y que no muchos jugadores pueden hacer", dijo al sitio mediotiempo.com.