Fútbol español: Mallorca iguala con Espanyol

MALLORCA.- El Mallorca empató hoy ante el Espanyol (2-2) un partido en el que el venezolano Juan Arango fue el gran protagonista, al abrir el marcador, con un gran gol y lograr el empate para los visitantes, tras introducir el balón en su arco, al tratar de despejarlo de cabeza.

El conjunto mallorquín, no obstante, frenó la marcha triunfal del Espanyol en la Liga, que acumulaba cuatro victorias seguidas, pero no pudo impedir que el conjunto blanquiazul arrancara un punto del Ono Estadi, en un partido marcado por las expulsiones, una por bando, de Sergio Ballesteros alos 24' y de Clemente Rodríguez en el minuto 55.

El Mallorca estuvo a punto de culminar lo que hubiese sido su tercera remontada consecutiva en su campo, porque el marcador señalaba un 1-2 en la segunda parte, pero se quedó a medio camino. Además, en los minutos finales perdió a su goleador Daniel Güiza, con un posible esguince en la mano derecha.

El Espanyol sigue sin sentirse cómodo en Palma, donde no gana desde la temporada 1999-2000 y sólo había arrancado un empate en las últimas siete visitas.

Arango metió al Espanyol en un lío, en el minuto 2, con un golazo y lo sacó de él en el 22, con un autogol. En ese periodo de tiempo, sólo había existido un equipo, el Mallorca, que se estaba dando un festín ante un rival que ni siquiera había inquietado al meta Miquel Ángel Moyá.

Los dos goles fueron precedidos por sendas faltas directas. En el tanto del Mallorca, el argentino Ariel Ibagaza dio una asistencia de oro al venezolano Juan Arango para que marcara con la pierna izquierda, con una volea inapelable.

En el empate del Espanyol, Luis García sacó un fuerte disparo que Arango cabeceó a la red en su intento de despejar. Con el 1-1 (min. 20) empezaba otro partido, pero duró poco.

En el 24', Tamudo le ganó la partida al portugués Nunes en el área y Sergio Ballesteros tuvo que derribarlo. El colegiado Undiano Mallenco señaló penalti y expulsó al defensa "rojillo", lo que encrespó los ánimos en las gradas del Ono Estadi.

En un abrir y cerrar de ojos, el Mallorca se vio en la peor de la tesituras, con el marcador en contra y un jugador menos.

¿Y qué había hecho el Espanyol para merecer todo eso? Muy poco, sólo llegar dos veces al área local a través de la velocidad de Albert Riera, Luis García y Raúl Tamudo. Fue suficiente para aplacar los ánimos del equipo de Gregorio Manzano y afrontar la segunda parte con gran ventaja.

Los dos últimos partidos en casa (ante el Valladolid y Getafe) el Mallorca fue capaz de remontar un 0-2 en la segunda parte. Habría que ver la respuesta del equipo ante un Espanyol en estado de gracia.

La expulsión de Clemente ayudó mucho a un Mallorca que presionaba y tenía el balón en sus pies pese a la inferioridad numérica. El técnico del Espanyol, Ernesto Valverde, avisó de sus intenciones al sustituir al siempre peligroso Raúl Tamudo por un hombre de contención, Lacruz.

Entonces, surgió en toda su plenitud el goleador jerezano Daniel Güiza para controlar un balón en el área, revolverse como un gato y batir a Kameni, todo ello, ante una afición que ya creía a pies juntillas que su equipo iba a ser capaz de coronar una nueva remontada.

Güiza, lesionado, no acabaría el partido y eso lo notó su equipo en el tramo final del partido, periodo en el que los dos equipos parecieron conformarse con el empate, resultado que, finalmente, fue inamovible.