HOUSTON.- Los Spurs de San Antonio vuelven una temporada más a la competición en la NBA con la filosofía de no tener en cuenta que son los campeones de liga, sino que, por el contrario, lo hacen mentalizados de que tendrán que trabajar más que nunca si quieren seguir siendo un equipo ganador.
El haber conseguido el cuarto título de liga en las últimas nueve temporadas es sólo para el entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, la mejor muestra de que han trabajado duro y que al final han sido superiores a sus rivales.
Bajo el lema de que lo que "funciona no se toca", Popovich no tiene ningún problema de que consideren que su equipo está ya formado por "viejos", algo que se lo vienen diciendo desde hace varias temporadas y a lo que responde con los resultados deportivos y los títulos.
Popovich no ha renovado la plantilla, mantiene la misma de la temporada anterior, y asegura que tener a los veteranos les da experiencia, y que bajo la dirección del alero Tim Duncan también se transforma en una disciplina absoluta dentro del campo, algo que le falta a la mayoría de lo equipos de la NBA.
La formula con la que Popovich y los Spurs quieren revalidar el título será también la misma de siempre y consiste en hacer la mejor defensa de la liga, trabajar de principio a fin de cada partido y apoyarse en las genialidades del escolta argentino Manu Ginóbili y la efectividad del base francés Tony Parker.
El banquillo plagado de veteranos como Michael Finley, Brent Barry y Robert Horry, que pueden anotar triples mejor que nadie en la NBA, volverá a ser un factor importante en la defensa del título de campeones de la Conferencia Oeste y de la liga.
A pesar de tener el mismo equipo de la pasada temporada, los Spurs están entusiasmados de todas las posibilidades que poseen para revalidar el título.
Para nada les preocupa los refuerzos que han conseguido los Mavericks de Dallas con la llegada del veterano escolta Eddie Jones, el alero Brandon Bass y Trenton Hassell, que dejó a los Timberwolves.
Lo mismo que los Rockets de Houston, sus rivales mas directos en la división Suroeste, a los que les cedieron los derechos del alero argentino Luis Scola, considerado como el mejor jugador extranjero que ha llegado esta temporada a la NBA.
"Somos conscientes que hay hasta siete equipos dentro de la Conferencia Oeste que pueden perfectamente aspirar al título, pero también confiamos en nuestras posibilidades y sobre todo en la discreción del trabajo y no dar nada por garantizado", destacó Popovich.
Sin embargo, la confianza y familiaridad que los Spurs tienen como equipo ha permitido a Popovich que durante la pretemporada le diese mayor descanso a los titulares ante la familiaridad que todos tienen con el sistema de juego.
"No tenemos ninguna urgencia de conocernos, todo está aprendido, sabemos lo que debemos hacer y lo que no dentro del campo", agregó Popovich. "Tampoco nos preocupan los rivales, siempre salimos a luchar por el triunfo, sin importar las veces que las hayamos conseguido antes".
Frente a esta filosofía de confianza completa, disciplina, excelente defensa y gran compañerismo de los Spurs, los Suns de Phoenix volverán a ser los rivales directos que más le pueden hacer daño y tal vez arrebatarles el título de campeones de la Conferencia Oeste y de la liga.
La pasada temporada hicieron todos los méritos y en parte, decisiones en los despachos de la NBA, impidieron que los Suns con su gran baloncesto de ataque y espectáculo pudiesen también conseguir el título.
Esta temporada los Suns se ha reforzado con el veterano Grant Hill y el ala-pívot Brian Skinner, que llega para ocupar el puesto de Kurt Thomas, que se fue con los SuperSonics de Seattle.
El resto del equipo es el mismo, con el base canadiense Steve Nash como el director perfecto del juego, para muchos el mejor base sin discusión de la NBA, y el pívot Amare Stoudemire, que podría ocupar el puesto de Duncan como el futuro jugador más completo de la liga.
"Nos tenemos que olvidar de lo que sucedió el año pasado en las finales de la Conferencia Oeste y debemos centrarnos en mejorar en aquellos aspectos del juego que no hicimos bien,” comentó Mike D'Antoni, entrenador de los Suns. "Estoy muy contento con la continuidad de la mayoría de los jugadores".