González termina el año séptimo y Massú a la baja

MADRID.- Fernando González cerró un año más de crecimiento profesional y terminó la temporada en un expectante séptimo puesto del escalafón mundial. González totalizó 2.005 puntos y conservó su casillero luego de ganar un sólo partido en su paso por el Masters de Shanghai.

En la cita de los ocho mejores del mundo, González derrotó por primera vez en su carrera al número uno del mundo, el suizo Roger Federer, pero cayó en sus siguientes dos partidos de grupo (Roddick y Davydenko), lo que supuso su eliminación en primera fase.

En el caso de Roger Federer, el suizo termina un año más como líder inalcanzable, comandando las dos clasificaciones de la ATP.

El español David Ferrer, por su parte, fue el único de los maestros que logró mejorar su ubicación final en la Carrera de Campeones, donde ahora figura en el quinto puesto.

Massú baja y Capdeville se le acerca cada vez más

Para el resto de los chilenos, el año 2007 ha sido de constrastes. Nicolás Massú, compañero de habitual de González en cuanto a logros, sufrió particularmente en este período de 11 meses. Nunca pudo encontrar su tenis y lejos de mejorar en la cancha, parece haber retrocedido.

Desde el casillero 79, Massú tratará de recuperar la alegría por competir y por entrenar, guíado por Patricio Rodríguiez y Leonardo Zuleta. Su principal objetivo es tener al viñamarino contento y jugando bien, porque así los resultados llegan sólos. Más bajo que esta campaña, la peor en su carrera desde 2001, cuesta imaginar que pueda llegar.

En el caso de Paul Capdeville (100°), la tercera raqueta nacional ha tenido progresos evidentes. De la mano del argentino Diego Moyano, Capdeville ha entrado cada vez con más frecuencia a los grandes torneos y, a pesar de no tener actuaciones descollantes, ha soportado muy bien el desafío de batallar con los mejores tenistas del mundo.

La meta del jugador de Vitacura era meterse entre los 70 mejores tenistas del mundo, pero su rendimiento decayó en las últimas semanas, cuando incursionó en los torneos sobre arcilla de la Copa Petrobras. En el cierre de su periplo hizo cuartos de final (Buenos Aires) y esto sólo le alcanzó para mantenerse.

Con 24 años, Capdeville requiere hacer un muy buen año 2008, el tiempo de acostumbrarse a los más grandes ya pasó y ahora necesita cosechar el buen trabajo que viene haciendo en las últimas temporadas. Ese será su desafío.

Cinco años más tiene Adrián García (183°), que a esta altura de su carrera piensa en cómo administrar de su mejor forma sus últimos años en el tenis profesional. Lejos de las grandes luces, el penquista es el último de los cuatro jugadores chilenos que aspira a jugar los grandes campeonatos, aunque la mayor parte del año juega challengers.