Evo Morales volvió a 'vestirse de corto' para manifestar su protesta en contra de la determinación de la FIFA. 'Quiero expresar mi extrañeza por esta resolución, es una discriminación y una marginación', dijo el mandatario.
ReutersLA PAZ.- Unánime rechazo en Bolivia desató el veto de la FIFA a jugar partidos internacionales de fútbol sobre los 2 mil 750 metros, que afecta directamente a La Paz, Oruro y Potosí, donde equipos locales disputarán la Copa Libertadores de América y las clasificatorias al Mundial de Sudáfrica 2010.
El presidente Evo Morales, que encabeza una cruzada en favor de la universalidad de la práctica del fútbol, reaccionó con dureza a la medida. "Yo quiero expresar mi extrañeza por esta resolución de la FIFA, es una discriminación y una marginación", dijo.
"Apelamos a la conciencia de muchos países que incentivan esta actividad" porque consideramos que "ninguna ley, ninguna resolución, ninguna constitución puede ser intocable ni irrevisable", sustentó.
Morales planteó además a la FIFA, que anunció la medida el sábado, "cambiar el modelo de campeonato Mundial que llevan adelante", puesto que este tipo de torneos "no puede estar orientado con fines de lucro y con fines discriminatorios".
La declaración del mandatario boliviano replica la decisión del órgano rector del balompié mundial de que a menos que se cuente con la debida aclimatación no se permitirá que partidos de las competiciones de la FIFA se disputen a una altura superior a los 2 mil 750 metros sobre el nivel del mar.
La resolución de la FIFA anuncia además que "se recomendará que el mismo límite se establezca en otras competiciones internacionales".
"Con mucho respeto digo a los señores de la FIFA que en vez de que nos pidan cambio de estadio, ellos debían cambiar el modelo de campeonato mundial que llevan adelante (puesto que este) no puede estar orientado con fines de lucro y con fines discriminatorios", dijo el mandatario.
Florencio España, presidente del club San José de Oruro, actual campeón y representante boliviano a Copa Libertadores, expresó "indignación" por la medida que constituye "otro golpe duro al país".
El presidente de Real Potosí, otro representante boliviano en la Libertadores, Samuel Blanco, calificó la resolución FIFA de "aberración".
La medida afecta directamente a las ciudades bolivianas de La Paz, Oruro y Potosí, emplazadas entre los 3 mil 600 y 3 mil 800 m de altitud y cuyos equipos están clasificados a la próxima edición de la Copa Libertadores de América.
El estadio Hernando Siles en La Paz es la sede hace más de medio siglo de los partidos oficiales del seleccionado boliviano y donde en 1963 logró su único Campeonato Sudamericano, el antecedente más directo de la actual Copa América.
También allí alcanzó una inédita clasificación al Mundial de Estados Unidos 1994 luego de batir a Brasil 2-1 haciendo trizas el invicto del 'scratch' en eliminatorias sudamericanas al ecuménico de fútbol.