MADRID.- El entrenador del Real Madrid, Bernd Schuster, realizó un balance de su tiempo en el club en una entrevista con el diario Marca, mientras la Liga descansa en su receso navideño hasta el próximo 5 de enero.
"Entrenar en el Real Madrid era algo que soñaba desde siempre y me ha hecho feliz desde el primer día", dijo Schuster en la entrevista en la que comentó también que el club cambió mucho desde su etapa como jugador, hace unos 15 años.
"Lo que más costó fue adaptarme a la prensa, no estaba acostumbrado (...) pero el presidente se está preocupando por volver al club a lo que debe ser: un club que principalmente se preocupa por el fútbol", añadió.
Con fama de hombre serio, Bernd Schuster aseguró a Marca que "estamos ante un Real Madrid que puede marcar una época", aunque en opinión del alemán aún no se alcanzó la excelencia.
"El Madrid es un equipo incómodo para sus rivales y temible por su calidad (..) estamos jugando bien, pero no tanto como nos gustaría", reflexionó.
Respecto a la reciente victoria madridista ante el FC Barcelona, Schuster se mostró contento por la actitud del equipo.
"Los mejores minutos los jugamos en las primeras partes de los partidos ante el Valencia y el Lazio y en San Mamés. No tanto por lo espectacular sino por la actitud del equipo, como en Barcelona", destacó el alemán.
"Nuestra defensa (el local Sergio Ramos, el argentino Gabriel Heinze, el brasileño-portugués Pepe y Fabio Cannavaro de Italia) nos da muchas garantías", dijo.
El entrenador también pasó por malos momentos y partidos. "Sufrí bastante en alguno partidos (...) como el que hicimos en Getafe. Pero los peores partidos son los que tenemos después de las suspensiones por las selecciones. Tres cuartos del plantel diez días afuera (...). Los jugadores vuelven con otro chip", remarcó Schuster durante la entrevista.
"Soy una persona de que no me gusta amonestar a mis dirigidos. Lo que menos necesitaba Robinho era un reto monumental pero hablé con el jugador y luego se vio que reaccionó fenomenal," explicó Schuster refiriéndose al bajo rendimiento por el que pasó el brasileño Robinho hace unos meses.