BAgdad.- El gobierno de Irak no quiere aceptar que los deportistas del país sean excluidos de los Juegos Olímpicos de Beijing y por ello ha enviado a una delegación hasta Lausana para reunirse con el COI, según informa hoy la agencia de noticias local Aswat al-Irak.
La delegación está dirigida por el portavoz gubernamental, Ali al-Dabbagh, y la misión del viaje a Suiza es hacer cambiar de opinión a los dirigentes del Comité Olímpico Internacional (COI). El jueves, el COI había explicado que el gobierno iraquí no había respondido a la invitación para reunirse.
El gobierno de Irak disolvió el Comité Olímpico del país en mayo al alegar que era ilegítimo porque su elección carecía de acuerdo legal.
El COI señaló que era una interferencia política en los asuntos de un cuerpo independiente y pidió al gobierno que cambiara su decisión.
Los deportes afectados por el retiro de las invitaciones olímpicas son judo, remo y halterofilia. El atletismo, que se disputa en la segunda semana de los Juegos, aún mantiene abiertas sus clasificaciones, por lo que la presencia de un deportista iraquí es posible, aunque ello depende de que el gobierno de Bagdad acerque posiciones con el COI.
"En los últimos cinco años el COI y la familia olímpica han aportado fondos y oportunidades de entrenamiento para apoyar al Comité Olímpico Iraquí y a más de 50 atletas y entrenadores. El gobierno de Irak ha destrozado este progreso", había dicho el COI en un comunicado.
"Aún esperamos ver a Irak en los Juegos, porque el atletismo tiene un cierre de inscripciones más tardío que otros deportes, y para ese entonces podría haberse solucionado la situación", dijo a la agencia dpa Emmanuelle Moreau, portavoz del COI.
"Es una esperanza muy pequeña, leve, pero existe", añadió Moreau.
