Andy Murray se dio el gusto de propinarle un 6-0 al número uno del mundo en el útlimo set.
ReutersROTTERDAM.- El tenista escocés, Andy Murray, número cuatro del ranking mundial, hizo lo que parecía imposible: derrotó en la final del Abierto de Rotterdam a Rafael Nadal, número uno del mundo y flamante campeón del Abierto de Australia pasado, por parciales de 6-3, 4-6 y 6-0, transformándose en el primer británico en ganar el certamen holandés.
El trámite del encuentro comenzó en favor del Murray, que ya había vencido a Nadal en las semifinales de U.S Open del año pasado, quien más adaptado a la cancha rápida de Rotterman se llevaría la primera manga por un 6-3, inclinando la balanza a su favor.
Pero con Nadal nada puede darse por seguro. El mallorquín comenzó a exhibir su garra caraterísitca, y a pesar de presentar dolores en su pierna derecha que hicieron que el fisioteraupeuta lo atendiera en la pista, abrochó la segunda manga por 6-4 tras quebrar el saque de Murray.
Las dolencias siguieron castigando a Nadal, que visiblemente diezmado aguantó hasta el final del encuentro el trámite arrollado de Murray en el tecer set, dando muestra de su profesionalismo.
El escocés se pondría rápidamente 5-0 en la tercera manga, momento en que Nadal meditó una retirada que finalmente descataría para no opacar la jornada de su rival, que terminó abrochando el set por un contundente 6-0.
Una vez finalizado el encuentro, el español confirmó sus dolores señalando que "volví muy cansado de Melbourne. Haber llegado a la final aquí es un buen resultado", dijo el español que también aprovechó de felicitar a Murray por "su excelente principio de temporada”.
En tanto, el flamante campeón manifestó su "tristeza" por la lesión de Nadal, señalando que "me di cuenta de que tenía molestias en la pierna derecha, es una pena".
De esta manera, Murray, consiguió el décimo titulo de su carrera, y dejó 2-5 la cuenta ante Nadal en enfrentamiento entre sí.