Curicó Unido festejó por primera vez desde que ascendió a Primera.
Andrea Robles, El Mercurio
SANTIAGO.- Mucho se jugaba esta tarde en el estadio Municipal de La Cisterna. Curicó Unido buscaba su primer triunfo en el torneo, mientras Palestino quería remontar el pésimo arranque de torneo.
Pero fueron los de la Séptima Región los que se llevaron un triunfo categórico, y que no solo les entregó la primera victoria en el fútbol de honor, sino que desnudó a un Palestino que sigue mostrando una actitud diametralmente opuesta a la del Clausura 2008.
Desde el comienzo Curicó se mostró más activo, liderado por el volante uruguayo -ex Aurora de Bolivia- Alberto Ortega. Tras intentar en un par de ocasiones, el mediocampista encontró el gol en la boca del arco tras un córner, donde la defensa de Palestino hizo aguas (10').
El "Tino" no tuvo reacción y Luis Musrri reclamaba y lanzaba manotazos al aire sin encontrar respuesta. A los 36' del primer episodio, César Díaz anotó el 2-0 mediante cabezazo tras un centro de Pedro Muñoz, luego de una jugada en la que los albirrojos tocaron el balón en plena área palestinista sin recibir resistencia.
En el segundo tiempo, el técnico de Palestino dispuso dos cambios, pero nada logró. Con Harold Mayne-Nicholls en la tribuna, el partido se estiró a favor de los curicanos, que anotaron el tercero a los 49' tras otro cabezazo, esta vez de Ortega luego de un pase preciso de Johan Fuentes.
Tras la anotación definitiva, se dio una jugada sintomática respecto al momento que vive Palestino. Francisco Ibáñez, una de las figuras del torneo pasado, enfrentó solo al portero Luis Vásquez y erró de manera increíble. Musrri no lo podía creer y, en vez de enojarse, solo atinó a sonreír.
A los 60 minutos apareció el protagonismo del irregular árbitro Claudio Fuenzalida: luego de un golpe del portero Felipe Núñez a César Díaz, el juez se complicó como si estuviera en la más disputada de las finales. Sin saber qué hacer, decidió mostrarle tarjeta amarilla a ambos jugadores hasta que la sangre en el rostro del delantero le generó unas dudas incontrarrestables.
Tras charlar con sus dos asistentes y el cuarto árbitro, el juez volvió todo atrás, le mostró tarjeta roja al arquero y marcó penal a favor de Curicó. Luego de siete minutos de detención, Pedro Muñoz marcó el 4-0 definitivo, que selló el duelo ante 1.510 personas controladas.
Los curicanos, acompañados por un millar de hinchas, se fueron felices con un triunfo histórico mientras Palestino sigue mostrando la cara opuesta de lo que jugaba en diciembre pasado, en fútbol pero sobre todo en actitud.
Los albirrojos suman de esta manera 6 puntos en la tabla de posiciones y en la próxima fecha recibirán a Audax Italiano; Palestino es el único colista sin unidades y debe visitar a la embalada Unión Española.