BARCELONA.- "¿Ahora sí quieren hablar conmigo, chicos?", dijo a la prensa con una sonrisa Rubens Barrichello después de destrozar el cronómetro del Circuito de Cataluña con su nuevo Brawn, con el que se postula ya como sorpresa para el campeonato del mundo de Fórmula 1 que se inicia el 29 de marzo en Australia.
Los tests de pretemporada de Fórmula 1 en Barcelona se cerraron hoy con un destacado triunfador: la nueva escudería Brawn GP, que volvió a superar con mucha diferencia a todos sus rivales.
El campeón del mundo, el británico Lewis Hamilton, mejoró hoy hasta la octava posición, pero su McLaren-Mercedes sigue a casi dos segundos del Brawn de Barrichello.
"He esperado que llegara este momento desde hace mucho tiempo, desde que llegué a Honda", dijo Barrichello, que no se veía tan arriba desde sus tiempos de secundario en Ferrari, a la sombra del multicampeón alemán Michael Schumacher.
"Sólo es el comienzo, no hemos ganado nada", matizó enfundado en un mono blanco raído, sin marcas, viejo, impropio de un piloto cuyo coche es el más rápido de la parrilla a sólo dos semanas del inicio del campeonato.
"Estoy sorprendido de que mi cuello siga unido a mi cabeza", bromeó sobre la inactividad de cuatro meses fruto de la incertidumbre por el futuro del equipo tras la retirada de Honda.
Ahora, el británico Ross Brawn ya es el dueño del equipo y en sus primeros tests sobre el asfalto, el coche blanco, sin publicidad y con ribetes negros y amarillos fluorescentes impacta.
Del 15 al 17 de marzo en Jerez se disputarán los últimos tests de pretemporada, en los que Brawn podrá seguir evolucionando y donde McLaren-Mercedes espera mejorar esos dos segundos perdidos para que Hamilton pueda defender su título de campeón.