SANTIAGO.- La alegría era total en la hinchada chilena, luego que la "Roja" venciera 3-1 a Perú tras 24 años de sequía como visita por clasificatorias.
El equipo nacional tenía presupuestado llegar a las 01:00 de esta madrugada, sin embargo el bus que los trasladaba desde el estadio Monumental de Lima se atrasó, debido a que tuvo que esperar al delantero Humberto Suazo quien se realizó el examen antidoping.
Una vez en el avión charter el equipo de Marcelo Bielsa, que en ningún momento tuvo problemas en su traslado al terminal aéreo peruano, se relajó y entre bromas y aplausos de los pasajeros los criollos emprendieron rumbo a Santiago.
En el aeropuerto internacional cerca de un centenar de hinchas esperaban al equipo de todos. Luego de más de dos horas de atraso, a eso de las 04:00 de la madrugada, los dirigidos por Bielsa fueron subiendo uno a uno hacía el bus que los llevó al Complejo Deportivo Juan Pinto Durán.
Pero el recibimiento, al igual cuando viajaron hacia lima el sábado, fue un verdadero caos. Los jugadores fueron acosados por los seguidores, les impedían pasar y les exigían firmar autógrafos o fotografiarse.
Por otro lado, la prensa apostada en el lugar intentó conversar con los protagonistas del histórico triunfo, pero fue imposible. La escasas medidas de seguridad provocaron que los jugadores y cuerpo técnico buscaran rápidamente escapar del público, además, a esa hora no estaban para comentar nada. La molestia era mayor.
Una vez en el bus, el plantel se trasladó arduo al recinto deportivo de la comuna de Macul donde quedó concentrado para el trascendental duelo de este miércoles con Uruguay.
El equipo chileno no lamenta bajas por lesión, salvo el suspendido por tarjetas amarillas Marco Estrada. Por lo que mostró la escuadra nacional en Lima, se espera que Bielsa utilice la misma oncena contra los uruguayos.