Nadie le quita la sonrisa de la cara a Robin Soderling.
AP
PARÍS.- Una alegría casi incrédula seguía impresa en la cara de Robin Soderling incluso horas después de su victoria ante el español Rafael Nadal en los octavos de final de Roland Garros, el momento "más grande" en la carrera del tenista sueco.
"Ni siquiera podía soñar con esto antes del partido. No lo olvidaré nunca", dijo hoy domingo el sueco de 24 años, que hasta su duelo en la pista central de Roland Garros ante el número uno del mundo, el gran rey de la arcilla, ni siquiera se había metido antes entre los 16 mejores de un grande.
"Es el momento más grande de mi carrera", admitió Soderling, jugador número 25 del mundo, tras derrotar por 6-2, 6-7 (2-7), 6-4 y 7-6 (7-2) al español, que nunca hasta ahora había perdido en el Abierto de tenis de Francia.
Nadal llevaba 31 victorias y cuatro títulos seguidos sobre la tierra de París. Su figura parecía sencillamente insuperable sobre una superficie en la que manda con mano de hierro.
"Ya dije que enfrentar a Nadal en Roland Garros a cinco sets era el mayor desafío que existe, pero aún así siempre me dije: 'Tengo que creer'. Si no, no hay motivo para saltar a la cancha", aseguró.
"Jugué exactamente como había planeado hacerlo", explicó el sueco, que nunca había ganado en sus tres anteriores enfrentamientos a Nadal. "No quería que él me hiciera correr, quería ser yo quien le hiciera correr".
Soderling impidió además que Nadal batiera el récord de títulos consecutivos en Roland Garros, que tiene junto al también sueco Bjorn Borg. "Espero que al menos me mande un sms (mensaje de texto)", dijo el nuevo cuartofinalista con una sonrisa en la boca.