MADRID.- La asociación de equipos de Fórmula Uno (FOTA), tras mantener una reunión este jueves, decidió rechazar la última oferta presentada por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para 2010 y anunciaron que estudiarán la creación de un campeonato paralelo, según se afirma en un comunicado oficial.
La FOTA, que une a ocho de las diez escuderías del actual campeonato, es decir, a Ferrari, McLaren, Renault, BMW, Toyota, Brawn, Red Bull y Toro Rosso, mientras que Williams y Force India fueron expulsados de la asociación por inscribirse en el campeonato del próximo año sin condiciones, afirma en su comunicado que declinan "cambiar las condiciones originales de entrada al Campeonato del Mundo de 2010".
"Por ello -continúa el comunicado- los equipos no tiene otra alternativa que comenzar la preparación de un nuevo Campeonato que refleje los valores de los participantes y socios".
Los equipos afirma en su comunicado que se "han ignorado el deseo de la mayoría de los equipos. A las escuderías se les ha privado, por parte del poseedor de los derechos comerciales, de decenas de millones de dólares por lo menos desde 2006, pese a lo cual la FOTA ha cumplido con sus compromisos".
La FIA y la FOTA están abiertamente enfrentadas por la originaria intención de la primera de introducir un límite presupuestario voluntario de 46 millones de euros a partir de la próxima temporada y de dividir el certamen en dos categorías: una para los que se acojan a dicho límite, con una gran cantidad de prebendas técnicas, y otra para los que no lo hagan, sin esas ventajas.
Max Mosley, presidente de la FIA, anunció el miércoles en un nuevo intento de acercamiento, la posibilidad de ampliar ese tope presupuestario de 46 a 100 millones de euros y desde el 2011 dejarlo de nuevo en 46, y acabar con esas dos categorías, un paso adelante del organismo rector del automovilismo internacional que podría acercar las posturas a un día del anuncio de la lista definitiva de equipos.
La FOTA, tras estudiar esta propuesta en la reunión que han mantenido en las instalaciones de Renault en la localidad inglesa de Enstone, decidió desestimarla y preparar su propio campeonato para la próxima temporada.