MARBELLA.- La actual campeona de la Copa Davis, España, buscará a partir de mañana viernes las semifinales de la competición por naciones sin su número uno, Rafael Nadal, y ante una renovada Alemania.
El español Fernando Verdasco abrirá la serie en Marbella ante el novato Andreas Beck, según decidió hoy el sorteo de emparejamientos.
El segundo partido de individuales lo disputarán el número uno alemán, Philipp Kohlschreiber, con el segundo jugador español, Tommy Robredo. Para el dobles del sábado, los capitanes nominaron a Verdasco y Feliciano López, por los locales, y a Nicolas Kiefer y Mischa Zverev por los visitantes.
El domingo se enfrentarán los numero uno en el primer single del día y los número dos en el segundo, aunque las reglas de la competición permiten hacer cambios de jugadores hasta poco antes del comienzo de los duelos.
El equipo español tiene también en la recámara a Juan Carlos Ferrero, ex número uno del mundo y campeón de la Davis en 2000 y 2004. El veterano jugador de 29 años fue llamado a último momento por Albert Costa para sustituir al lesionado David Ferrer.
Los 13.000 fans que llenarán las gradas de la Plaza de Toros de Marbella, donde se ha instalado la cancha de arcilla para la serie, no podrán ver al gran ídolo del tenis español, Nadal. El ex número uno del mundo sigue recuperándose de la lesión en la rodilla que le impidió participar en Wimbledon.
Pese a todo, los españoles son claros favoritos ante un equipo alemán que tiene en Kohlschreiber, número 29 del mundo, a su mejor hombre. Tommy Haas, número 18 del mundo, renunció a representar a su país ante la exigencia que suponía para un hombre con su historial de lesiones pasar de la hierba a la tierra y de la tierra al cemento en apenas un par de semanas.
Las ausencias obligaron al capitán alemán, Patrick Khnen, a emprender la renovación del equipo con la convocatoria de los debutantes Beck y Zverev."Para mí es un sueño", aseguró Beck, cuartofinalista en Montecarlo, que tendrá enfrente nada menos que al número nueve mundial y héroe de la final que España ganó en 2008 ante Argentina contra pronóstico, también sin Nadal y en cancha ajena.
Más ajustado parece el duelo entre Kohlschreiber y Robredo, que sin embargo se impuso en los cuatro enfrentamientos que tuvieron hasta ahora, el último en los octavos de final de Roland Garros.
"Las últimas veces fue siempre ajustado. Y con Khnen en el banco podemos reaccionar mejor", dijo el alemán. El capitán español, Albert Costa, no quiere ni un ápice de relajación por parte de sus pupilos. "Será una eliminatoria difícil", advirtió.
