Real Madrid venció a la Real Sociedad de Claudio Bravo por 2-0

SANTIAGO.- La Real Sociedad, cuadro donde milita el arquero chileno Claudio Bravo, cumplía cien años y para celebrarlo organizó un partido amistoso ante el Real Madrid, de Manuel Pellegrini.

Podría haberse dicho que las diferencias serían abismales entre la opulencia del cuadro madrileño y el que este año luchará por salir de la segunda divisón de España.

Sin embargo, el buen nivel del fútbol hispano cierra esas grandes grietas que pueden imaginarse de entrada.

En Anoeta se vio un partido relativamente parejo. Es cierto, el Real Madrid dominaba el balón, pero no traducía el toque constante en avances de peligro a la cabaña custodiada por Claudio Bravo.

En la primera fracción, el capitán de la selección chilena tuvo que trabajar bajo presión en tres ocasiones. Un tiro libre de Ronaldo lo obligó a rechazar con los puños y otro intento del portugués lo sacó sobre el travesaño. Además, tuvo que ir abajo, sobre su izquierda, para ahogar otro remate desde 25 metros.

Eso en concreto, pero Bravo también pasó algunos sustos con tiros desviados de Ronaldo, Benzemá y Raúl.

Hasta ahí, el meta chileno le regalaba el cero a los de San Sebastián en su centenario, pero a trs minutos de iniciado el complemento, Bravo tuvo una pobre reacción ante un tiro libre de Ronaldo.

El portugés disparó frontal desde 30 metros. Bravo parecía controlar el balón, pero cuando intentó embolsarla le rebotó en el pecho y el rebote le quedó a Benzemá. El francés sólo tuvo que empujarla.

Tras eso, el cuadro de Pellegrini siguió dominando y llegando a la meta donostiarra, pero el capitán nacional estuvo brillante en tres ocasiones más para salvar a su valla.

Pero llegó el minuto 90 y Sneijder ejecutó una pelota muerta a 35 metros el arco de la Real Sociedad. Le pegó por fuera de la barrera, con pie derecho, y la pelota se coló magistralmente en el palo más lejano de un Bravo que volaba sin alcanzar el misil del holandés.

Claudio Andrés Bravo nuevamente dio muestras de su gran nivel, pero una duda hizo que el primero del Madrid cayera en Anoeta. El primero de un Madrid que lentamente va aceitando sus engranajes y tomando la forma que todos los merengues esperan.