Aunque Paredes no pudo marcar, habilitó a Bogado para la apertura de la cuenta. El ''Chofer'' fue un peligro para la zaga minera.
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SANTIAGO.- De momento, Colo Colo pasó las penas y las preocupaciones. Hace cinco fechas, el conjunto albo coqueteaba con el descenso. La hinchada se tomaba la cabeza y Hugo Daniel Tocalli pendía de un hilo. Pero hoy, sábado, todo cambió: el Cacique timbró su boleto a los playoffs.
En el estadio El Cobre de El Salvador, Colo Colo fue superior a Cobresal, un cuadro ordenado y aguerrido, pero que no pudo frente al progreso del juego de los albos -hoy vistieron de negro.
La visita dominó las acciones y se creó las mejores ocasiones de gol, pero tuvo que esperar hasta el 43' para abrir la cuenta.
Todo lo inició José Manuel Rey quien, desde el fondo, cedió para Macnelly Torres -de muy buen cometido. El colombiano metió un pase profundo para que apareciera por la izquierda Esteban Paredes. El "Chofer" encaró, burló al meta Roberto González y tocó atrás para que definiera Cristián Bogado.
En la segunda fracción, la tónica se mantuvo. Eso sí, el conjunto de José Cantillana se creó más oportunidades de gol, pero sin la profundidad y la fineza para que terminaran en la red.
Al otro lado, Colo colo carecía de la puntada final. Y pasó lo mismo que en el primer tiempo. Los albos tuvieron que esperar casi hasta el final para volver a abrazarse.
Rodrigo Millar encaró por la izquierda del ataque forastero y definió cruzado ante la salida de González. Un minuto antes, nuevamente se lo había perdido Paredes de forma increible.
Con este triunfo, ya está dicho, el cuadro de Hugo Tocalli, aseguró su concurso en los playoffs después de una atribulada fase regular. Los albos jugarán la última fecha frente el aproblemadísimo Palestino.
En tanto, Cobresal se mantiene con 38 puntos, al borde la Liguilla de Promoción. Los mineros cierran la fase regular del Clausura ante Audax Italiano. El elenco del norte está cerca de la "Liguilla del terror", pero sigue dependiendo de sí mismo para zafar. Ante los itálicos, los hombres de José Cantillana se jugarán la vida.