Roberto Gutiérrez aprovechó una falla en la zaga viñamarina para marcar el 2-0 a los 67 minutos.
Tomás Fernández, El Mercurio.
SANTIAGO.- Las cosas quedaron claras desde el inicio. Tras el pitazo de Pablo Pozo, Universidad Católica comenzó a urdir ataques veloces, a abrir la cancha y a poner pausas que permitieran volver a tejer opciones de gol. Eso hacía la UC: intentar llegar al gol.
Por su parte, Everton -el local-apostó por lo que mejor le resulta, agazaparse atrás y buscar las salidas rápidas y los pases delicados y precisos de Jaime Riveros.
La fórmula cruzada surtía mejores réditos, pero no le alcanzaba para inquietar en forma concreta a Gustavo Dalsasso, que promediando el primer tiempo sufrió un corte en el meñique de su mano derecha tras chocar con Roberto Gutiérrez. Aún así, el meta siguió en cancha.
En la segunda fracción, los de Marco Antonio Figueroa entraron con más ganas y fuerza. Y con la misma idea del primer tiempo en la cabeza. Así las cosas, la UC logró llegar con más peligro hasta la puerta ruletera, pero antes, a los 50 minutos, una mala salida de Paulo Garcés pudo contar la historia en forma diferente.
Un pelotazo profundo para Maxi Pérez boteó en la entrada del área cruzada. Garcés había salido a capturar el balón, al igual que el delantero. Con el pique en el suelo, la redonda los sobró a ambos y el cancerbero cruzado, con el envión, golpeó con su rodilla -y el resto del cuerpo- a Pérez, que cayó dentro del área. Era penal. Pozo no lo estimó así.
Y en el minuto 64 se desató la algarabía entre los fanáticos del equipo de la precordillera. Un centro desde la derecha servido por Valenzuela es rechazado por la defensa viñamarina y la segunda pelota la capturó Silva, que abrió por derecha para Mena.
El reemplazante de Toloza, miró hacia el corazón del área y sacó un centro que capitalizó Damián Díaz en el segundo palo. Díaz la bajó, Díaz remató y Díaz lo gritó. Era el 0-1.
Y sólo tres minutos más tarde, Sebastián Rocco recuperó una pelota a 30 metros del arco de Dalsasso. El defensor tocó hacia atrás, para Adrián Rojas, pero el líbero falló en el control y Roberto Gutiérrez -siempre al acecho- aprovechó el error y remató al arco para, con un ajustado sombrero, vencer a Gustavo Tulio Dalsasso.
Sobre el final (88'), un balonazo profundo para J.J. Morales (entró en la segunda etapa) encontró la salida del portero viñamarino; fue una salida rápida, urgente, a diez metros del área y evita el avance cruzado con una de sus manos. Pozo no dudó y le mostró la roja. Cristián Uribe se ubicó bajo los tres tubos durante los últimos minutos de juego.
Con este resultado, Universidad Católica llega con más del 50 por ciento de la serie ganada. Los cruzados tienen el triunfo y dos goles a favor. Dos goles de visita.
Everton, por su parte, confirmó que es uno de los equipos con peor rendimiento como local. En la fase regular, el cuadro ruletero sólo fue superado en esta línea por Municipal Iquique. Los de Nelson Acosta completaron su quinta derrota en casa.
El próximo martes, a las 22:00 horas, todo se definirá en el estadio San Carlos de Apoquindo.