JOHANNESBURGO.- Aunque todavía quedan algunos problemas por resolver, los estadios que acogerán los partidos del Mundial 2010 de Sudáfrica están terminados al 95%, a cinco días del sorteo que decidirá, el viernes, los ocho grupos de la primera fase de la competición.
A pesar de una huelga el pasado mes de julio, con más de 70.000 personas reclamando un aumento salarial, de los grandes apagones de enero de 2008 y de los problemas climáticos, como la gran tormenta que hizo desplomarse una grúa en la ciudad de Nelspruit, las obras lograron respetar el calendario estricto fijado por la Federación Internacional de Fútbol (FIFA).
"Tuvimos altos y bajos, a veces con alegrías y a veces con tristezas ante las críticas y los pesimistas", dijo el portavoz del comité local de organización (LOC), Rich Mkhondo, que asegura que los cinco nuevos estadios y los cinco estadios renovados están terminados en un 95%.
Sólo quedan algunos arreglos finales, como instalar las barreras de seguridad, plantar árboles y terminar las zonas de estacionamiento y las vías de acceso.
Además, también están por terminar algunas obras anexas. En Durban, por ejemplo, se está modernizando el paseo marítimo, uno de los atractivos de la ciudad, desde donde se ve el nuevo estadio en forma de casco al revés.
Pero conseguir terminarlo todo antes del Mundial, que se disputa del 11 de junio al 11 de julio de 2010, no fue una tarea fácil. La capacidad de Sudáfrica para cumplir sus compromisos fue puesta en tela de juicio muchas veces, como cuando el estadio de Port Elizabeth quedó fuera de la Copa de Confederaciones a causa de los retrasos en las obras.