SANTIAGO.- El experimento es el siguiente: tomar a Rafael Nadal y a Marcelo Ríos, sacarle sus defectos y meterlos en una licuadora. El resultado sería simplemente increíble. Imaginar la potencia del español mezclada con el talento del chileno es presenciar a un tenista perfecto. Pero claro, los avances de la ciencia aún no permiten ese tipo de cosas.
Lo que sí es posible es que alguien sea criado con esas virtudes. Y al parecer, un joven chileno de 13 años va por el buen camino para conseguirlo. Su nombre es Bastián Malla, es zurdo, antofagastino y acaba de alcanzar -junto a Christian Garín- la final del Mundial de tenis Sub 14.
Y este resultado no es precisamente algo inesperado. Malla hace un buen rato viene haciendo ruido en el mundo del tenis juvenil. En el verano fue el ganador de 5 de las 6 etapas de la gira Cosat, lo que lo llevó a convertirse en el indiscutido número uno de Sudamérica. Ahora busca la consagración a nivel global.
En el torneo que se juega en República Checa tendrá como último obstáculo a los italianos. Con ellos intentará volver a demostrar porque Sergio Cortés, uno de los entrenadores que lo formó, lo compara con el número del mundo y el mejor deportista chileno del siglo XX.
"Bastián tiene un derecho muy parecido al de Nadal. Le pega muy liftado (con efecto) y con mucha fuerza. Y su revés es muy similar al del "Chino" (Ríos): le pega más bien plano y encuentra ángulos que para cualquiera serían muy difíciles", analiza para Emol, el ex tenista.
Para Cortés, el camino a seguir por Malla debe ser el siguiente: "A los 16 o máximo 17 años ya debería comenzar a conocer el circuito profesional. Esperar más no vale la pena". Y si consideramos que Nadal, quien se coronó en el Mundial Sub 14 en el 2000, ya era "top 100" a los 17, el coach tiene toda la razón.
"Gordito y regalón"
Los inicios de Malla en el tenis fueron a los siete años en el Club de Tenis de Antofagasta. Pero el primer gran paso lo dio a los 10 cuando por casualidad fue a una clínica dada por Cortés.
"Nos encontramos con un chico con buenas condiciones, pero que era más bien gordito. Igual lo tomamos y empezamos a trabajar en su físico. En un principio costó porque era un poco flojo, muy regalón", cuenta el "Checho".
En poco tiempo Malla se dio cuenta de sus cualidades y trepó en el ranking nacional. Pasó de estar en los jugadores del montón a entrar al grupo de los cinco mejores en la categoría menores de 10.
Fue tanto lo que se puso énfasis en la formación de su físico, que la agresividad, según cuenta el entrenador, es su principal virtud y eso es lo que hay que seguir puliendo.
Actualmente Malla entrena bajo las órdenes del argentino Guillermo Pérez Roldán, ex número 13 del mundo, y de un grupo técnico que incluye al sicólogo Enrique Aguayo. Es tanto el estatus que ha ganado en el planeta tenis que incluso ya ha entrenado junto a Fernando González en el Club Providencia.
Si este sábado la joven promesa ayuda a Chile a conquistar su primer mundial de esta categoría sumará un nuevo logro y seguirá su camino para conseguir en base a entrenamiento algo que la ciencia aún no descifra como hacer: combinar a dos grandes talentos en una persona.