Las dunas de Copiapó trajeron la jornada más negra de los chilenos en el Dakar

COPIAPÓ.- Dolió en la armada chilena la salida de Boris Garafulic del Dakar 2011. El piloto nacional era el mejor criollo en autos, pero la fuerza de las dunas lo dejó fuera de la carrera.

No fue el único nacional que sufrió con el desierto de Copiapó. Sin ir más lejos hubo otro retiro que tocó fuerte en los pilotos que hoy son locales: La salida del corredor en quads, Rodrigo Ramírez.

Garafulic y Ramírez habían hecho una muy buena presentación en la prueba tuerca más extrema del mundo, ambos eran los mejores exponentes chilenos en cada una de sus categorías, pero la larga jornada del lunes fue mucho para estos dos debutantes.

Otros también sufrieron con la rudeza de la Tercera Región. Francisco Casale, por ejemplo, el único nacional en la categoría de camiones, llegó recién pasada las 11 de la mañana después de quedarse toda la noche en las dunas de Copiapó. Su hermano Ignacio tuvo que hacer lo mismo y recién a las 10:30 de la mañana de este martes pudo largar la novena etapa.

Gabriel Peschiera, en autos, tampoco pudo llegar antes de la madrugada y aún no se sabe si podrá continuar en carrera.

En tanto, Eliseo, se volcó, después pudo seguir y cuando estaba cerca de la meta presentó problemas mecánicos, por lo que estuvo hasta última hora arreglando el auto. Finalmente pudo salir, pero muy atrasado.

Fue el día más duro para los chilenos que ahora se aprestan a volver a Argentina y pasar por la última etapa más complicada de la prueba: El polvo de Fiambala.

Así, estos competidores se suman a las ya conocidas bajas de César Zuleta (auto), Diego Izquierdo (auto), Andrés Benavente (moto), Emiliano Fuenzalida (quads), Rodrigo Illanes (moto), Andrés Tamm (moto), Francisco Casale (camión) y Luis Eguiguren (auto).

Hoy martes, se sumó la baja del experimentado piloto nacional Eliseo Salazar, quien abanonó la competencia por problemas en su auto.