TOKIO.- La Asociación Japonesa de Sumo (AJS) anunció hoy domingo que anuló su Torneo de primavera por primera vez en 50 años, tras la revelación esta semana de que tres luchadores al menos admitieron haber arreglado sus combates.
Los directivos de la AJS se reunieron de urgencia el domingo y decidieron anular el torneo de marzo, según la prensa japonesa.
Se trata de la primera anulación de un torneo desde 1946.
Al anunciar el jueves que tres luchadores al menos habían por primera vez reconocido que hicieron trampa en combates, el gobierno japonés habló de "traición" hacia el deporte ancestral nipón, salpicado por este nuevo escándalo.
Desde hace tiempo planean sospechas de que hay trampas en los combates de esta disciplina que surgió en Japón hace más de 1.500 años, y cuyo origen está ligado a la religión shintoista, pero ningún sumotori, nombre dado a los luchadores, había reconocido hasta ahora haber amañado combates.
El sumo, reservado exclusivamente a los hombres, observa ritos casi religiosos, con sus gestos, sus códigos en las vestimentas o el arrojar simbólicamente un puñado de sal antes de cada combate para purificar el ring.
Pero en los últimos años, los japoneses han descubierto que detrás de la fachada respetable del deporte nacional nipón se esconde un mundo turbio, donde la violencia es algo corriente y circula mucho dinero sucio.