AFP
MADRID,. Fue Balón de Oro en 2007, ¿pero quién se acuerda ya de eso? Kaká transmite ultimamente la imagen de un "crack" en su ocaso, mientras comienza a convivir con rumores sobre una eventual venta a final de temporada.
El mediapunta brasileño fue titular el sábado ante el Deportivo de La Coruña y duró una hora sobre el campo. Cuando se fue, nadie consiguió recordar una sola jugada de peligro."Sal ya!", le gritó José Mourinho, su técnico, apremiando al sustituido para hacer sonora su humillación en un partido que los blancos sólo pudieron empatar.
El brasileño reapareció a comienzos de año después de dejar atrás diversas lesiones, nunca lo suficientemente aclaradas, que lo tuvieron 240 días sin ponerse la camiseta blanca.
Entonces Jorge Valdano, director del club, proclamó que Kaká era "el gran fichaje del Real Madrid para el nuevo año".
Pero lo cierto es que en este tiempo apenas disputó 11 partidos, jugando sólo 438 minutos de los 1.350 posibles, apenas un 32,4 por ciento del total.Sólo marcó dos goles y se quedó sin jugar en cuatro citas de altura: las semifinales de Copa del Rey ante el Sevilla, el encuentro de la Liga española ante el Espanyol y el partido de la Liga de Campeones ante el Olympique de Lyon.
Demasiado poco para un futbolista que hace 18 meses llegó al Real Madrid después de que el club blanco pagara 65 millones de euros (90 millones de dólares).
Todavía hoy es el quinto fichaje más caro de la historia del fútbol.Nada queda de aquel viejo glamour y hoy los periódicos se llenan de noticias que hablan del interés del Real Madrid por vender al jugador que no hace mucho se presentó ante 50.000 hinchas. Y se habla de equipos como Corinthians, Chelsea o Inter de Milán.
"La paciencia del Madrid con Kaká está a punto de acabarse y el club blanco ha decidido escuchar ofertas por su decepcionante rendimiento", publicó hoy el diario As.
Cuando Kaká debería estar próximo a su cénit, ya que cumplirá 29 años el 22 de abril, lo cierto es que el brasileño atraviesa los índices de popularidad más bajos. Tanto es así que sólo es portada de las revistas por dos motivos: el nacimiento de su segundo hijo (prensa rosa) y su eventual traspaso a final de temporada (prensa deportiva).
Nada se habla de sus méritos sobre el campo.Todavía quedan cuatro meses para el final de temporada, pero son cada vez más escasas las esperanzas de un cambio en el nivel de Kaká. Al menos en el Real Madrid.