Hace ya cuatro fechas que el Málaga es pura alegría.
EFE
MADRID.- Una primera parte incontestable del Málaga, sellada por los goles del brasileño Julio Baptista y el venezolano Salomón Rondón, condenó al Atlético de Madrid a una derrota inesperada, a la que el equipo rojiblanco intentó reaccionar en la segunda mitad, ya tarde para superar un 0-2 ante un buen rival.
El Málaga que dirige Manuel Pellegrini volvió a confirmar su buen momento con otro triunfo que le permite seguir mirando, cada vez desde más lejos, la zona baja de la tabla de posiciones de la Liga española.
Incluso encajó un tercer tanto, ya en el tramo final del choque y que completó un 0-3 humillante para el conjunto madrileño, frenado en su persecución de un cupo en la próxima edición de la Liga de Europa, en un duelo que siempre perteneció al conjunto andaluz, que ya acaricia la permanencia a falta de tres jornadas.
No especuló el Málaga ni un segundo en el Vicente Calderón. No se lo permitía la clasificación, por la cercanía con los puestos de descenso y los triunfos de algunos de sus rivales directos, ni el potencial ofensivo alineado por su técnico, el chileno Manuel Pellegrini, en busca de un triunfo fundamental para la permanencia.
Y le sometió al Atlético a un control exhaustivo toda la primera parte, a una lección de fútbol desde el principio hasta el descanso, con buen ritmo, ocasiones y dos goles, un castigo previsible para el equipo rojiblanco, desenchufado, fuera del choque y sin capacidad de reacción ante el incontestable dominio rival.
No funcionaba el Atlético camino al entretiempo. Ni en ataque, ni en el centro del campo, donde no encontraba la manera de asumir el control del juego, ni en defensa, agobiada y superada en cada acción ante el brasileño Julio Baptista, que o acababa derribado en falta o encaraba con la pelota, y el venezolano Salomón Rondón.
El Málaga lo transformó de inmediato en el marcador, con dos centros fenomenales, el primero de Jesús Gámez y el segundo de Sebas Fernández, y dos cabezazos imparables de Rondón (29') y Baptista (35') -su sexto gol en los últimos cuatro partidos-, beneficiados por los desajustes atrás del conjunto rojiblanco, que firmó un primer tiempo lamentable. El 0-3 final lo anotó el italiano Enzo Maresca.